Por Ramiro Melucci

María Eugenia Vidal saluda con una sonrisa amplia. Como si no le hubiera afectado el enfrentamiento que acaba de tener con el medio centenar de guardavidas que trataron de detener su camioneta. Pide algo para tomar, se sienta y consulta sensaciones sobre la temporada. Ella no tiene dudas: ve un buen caudal de turistas. Y cree que será mejor a las anteriores. “Hemos trabajado mucho para eso. La vuelta del tren, el aumento de los vuelos, los descuentos que ofrece el Banco Provincia en transporte, restaurantes, espectáculos y hoteles; el esfuerzo que ha hecho el sector privado”, enumera a LA CAPITAL en una entrevista exclusiva. Tras la inauguración de las playas públicas gratuitas, insiste: “Hoy casi 30 hoteles tienen una tarifa reducida, hay menú fijo para que las familias puedan salir a comer afuera. Además, el Operativo Sol, el SAME y las obras en rutas. Hay mucho esfuerzo, no sólo de los marplatenses, sino de todos los partidos de la costa, para que la gente nos elija”.

– ¿Cuánto depende de la seguridad el éxito de la temporada?
– Sin duda es muy importante, para la gente que viene a la costa y en particular a esta ciudad, saber que va a estar tranquila. La verdad es que en el Operativo Sol ha ido incrementándose el número de policías, en tecnología, en la seguridad que le damos a los turistas. Creo que la familia puede venir tranquila porque hay una cantidad de policías enorme. Además, estamos incorporando más destacamentos policiales móviles y torres de vigilancia. Y en las rutas vamos a estar custodiando que se cumplan con los niveles de seguridad adecuados para que haya menos accidentes.

– ¿Confía en que una buena temporada podría motorizar el empleo, que en Mar del Plata siempre es un problema?
– Sin dudas. Así como he venido todo el año, muchas veces por el Puerto, que logró sostener 250 puestos de trabajo por el fondo pesquero que pusimos en marcha, me van a ver trabajando para promover el turismo en la ciudad, porque el turismo es trabajo. Y esta ciudad necesita mucho mejorar su trabajo.

– ¿Qué va a cambiar a partir de la aprobación del pacto fiscal en la provincia?
– Los bonaerenses, con el tiempo, nos vamos a terminar de dar cuenta que es muy importante. Esta fue una semana histórica con la aprobación en la Legislatura. Ya habíamos firmado el acuerdo con los gobernadores y el Presidente, ya lo había aprobado el Congreso. Para la provincia es histórico que se pueda recuperar parte de lo que le quitaron cuando en la década del ochenta le redujeron su coparticipación. Durante muchos años la provincia aportaba el doble de lo que recibía, y eso no le pasaba a ninguna provincia del país. Y cuando vemos las rutas que faltan, las cloacas que faltan, el agua potable que falta, los niveles de pobreza del conurbano, que es el lugar donde hay mayor cantidad de pobres en la Argentina, es esa plata que no estaba y de a poco vamos a empezar a recuperar. En 2018 no va a haber grandes diferencias en relación con lo que recibíamos del gobierno nacional, pero en 2019 sí. Es más un legado que algo que vamos a recibir nosotros en esta etapa. Sin dudas es un antes y un después, porque es la posibilidad de que la provincia sea viable.

– ¿Más allá de las del conurbano, otras ciudades se van a beneficiar?
– Va a beneficiar a toda la provincia porque, si bien el fondo tiene un destino específico, que son los programas sociales y las obras en el conurbano, por supuesto que eso va a ayudar a que la provincia esté más equilibrada en sus cuentas y pueda ayudar también al interior. No obstante, la ley de coparticipación está pendiente y yo creo que la provincia se merece seguir discutiendo más. Pasamos de un 18% a un 23,24% de coparticipación y seguimos aportando el 37% de los ingresos. Hay que seguir peleando por lo que les corresponde a los bonaerenses.

– ¿Cómo vivió la semana en que se aprobó la reforma previsional? ¿Qué análisis hizo de todo lo que pasó?
– Con preocupación. Hay dos temas muy diferenciados. Una es la discusión de la reforma en sí misma, que parte de una base que todos los argentinos compartimos: los jubilados han ganado siempre mal. Cuando llegamos al gobierno, la jubilación era de 4500 pesos. Sin duda eso no es una conquista. Había miles y miles de jubilados que se morían esperando cobrar juicios que nunca llegaban. Eso el Gobierno lo resolvió mediante la reparación histórica.

– ¿No cree que aún hay debates pendientes sobre el tema?
– Sin duda quedan pendientes muchos aspectos de discusión para que un sistema jubilatorio sea justo para quienes aportaron toda su vida y, al mismo tiempo, sea sostenible. Entonces, tenemos que encontrar una salida mejor a futuro. Pero esa es una discusión, en la que cada espacio político puede tener una postura distinta y debatirla en el Congreso. Lo que no es aceptable es que esa discusión se salde mediante la violencia. Me parece que tenemos un problema los argentinos: tenemos que aprender a resolver nuestras diferencias sin considerar a la violencia como una opción. No es el camino. Eso debería ser repudiado unánimemente por todas las fuerzas políticas.

– ¿Cree que la suba del dólar puede perjudicar a aquellos que tomaron créditos? ¿El Banco Provincia puede hacer correcciones?
– Los créditos van a estar fundamentalmente vinculados con la inflación. Y la inflación, con las metas anteriores y con estas, va a estar alrededor del porcentaje que el Gobierno ha definido. Con lo cual, para aquellos que tomaron créditos, no creo que haya grandes cambios. Eso es lo que más impacta en los créditos, más allá del dólar.

– ¿Hay quienes dicen que los años que no son electorales, desde el punto de vista económico, son más difíciles. ¿Cómo avizora 2018?
– Yo no creo eso. Creo que desde el punto de vista económico va a ser un mejor año. Como el 2017 fue mejor que el 2016 y todos pudimos verlo, el 2018 va a ser mejor que el 2017.

– Se aprecia que algunas de las diferencias que manifestó con el municipio aún perduran. ¿Cómo ve la gestión de Carlos Arroyo?
– Yo he dicho públicamente que tengo diferencias, pero no va a ser ni el primero ni el último municipio con el que tenga diferencias. Poco menos de la mitad de la provincia está gobernada por municipios que no forman parte de mi espacio político y la verdad es que tengo diálogo con la mayor parte de los intendentes. Trabajo con todos. El intendente Arroyo fue elegido por la gente por cuatro años, al igual que nosotros. Y los dos tenemos la obligación de trabajar juntos por los marplatenses. Que yo tenga alguna diferencia con las políticas que lleva adelante el intendente no quiere decir que no sigamos trabajando en equipo, que no sigamos haciendo cosas juntos, como las hago con los intendentes de toda la provincia.

– Una de esas diferencias estuvo relacionada con las exenciones para las salas de cine y teatro. ¿Se van a mantener?
– Entiendo que el Concejo no las va a aprobar. Yo pedí particularmente que no lo hiciera. Por supuesto, el presupuesto es una competencia del municipio y el Concejo Deliberante, pero ya he dicho pública y privadamente que no estoy de acuerdo con la eliminación de esas exenciones y entiendo que no van a prosperar en la votación del presupuesto. Hemos hecho un enorme esfuerzo para que esta sea una buena temporada. Y parte de que sea una buena temporada es que haya una oferta teatral atractiva para los turistas. Entonces, me parecía que no era el momento de discutir este tema cuando todos estábamos empujando para que más gente viniera a Mar del Plata.

– Ha pegado muy fuerte en una parte de la comunidad local lo que sucedió con el ARA san Juan. ¿Qué mensaje puede darles a los familiares de los tripulantes? ¿La búsqueda va a seguir?
– Estuve con ellos. Les dije que, como gobernadora de la provincia y siendo que la mayoría de ellos son bonaerenses por adopción o porque nacieron en la provincia, los acompaño y mi equipo y yo estamos para todo lo que les haga falta y necesiten. La provincia está para ayudar. Para acompañar a la Armada en el trabajo que está haciendo de contenerlos, de acompañarlos en este tránsito que es tan difícil, que ha sido tan duro. También les dije que la búsqueda no ha finalizado. Independientemente de que Estados Unidos se haya retirado, la búsqueda continúa y la Armada va a seguir en esa búsqueda, que todos los argentinos queremos, porque lo que ha pasado ha sido muy triste para todos y es muy difícil atravesar esta situación sin encontrarlos y darle un cierre.

– ¿Qué le pareció la decisión judicial de otorgarle la prisión domiciliaria al represor Miguel Etchecolatz?
– Primero, nosotros fuimos el primer gobierno en democracia que le quitó su estado judicial. Es increíble, no, pero llegamos nosotros y Etchecolatz seguía siendo policía de la provincia, retirado, pero policía al fin, junto con otras 20 personas que habían estado involucradas e incluso condenadas en causas judiciales vinculadas con la dictadura. Les quitamos su estado policial porque nos parecía inadmisible que siguiera siendo parte. Además, la Provincia siguió siendo querellante en las causas. En relación con la medida, yo respeto las decisiones judiciales. Entiendo que para aquellos que atravesaron este período es muy difícil compartir esta decisión, pero es una decisión de la Justicia.