Con bancas abiertas desde las que se cuestiona el desempeño de la secretaria de Educación, Ana María Crovetto,  el Concejo Deliberante inició hoy una sesión extraordinaria para tratar un proyecto de ordenanza que plantea citar al intendente Carlos Arroyo y a las responsables de esa dependencia con el propósito de que expliquen los pormenores de su polémica visita a la escuela 205, interpretada por muchos docentes como un acto de intimidación contra su directora, quien había reclamado una conexión de internet para el establecimiento.

Más allá del contenido del proyecto, la sesión podría desembocar en que los concejales avancen con un pedido de interpelación de Crovetto, así como de la subsecretaria, Susana Rivero.

La controversia por la visita de Arroyo, Crovetto y Rivero en compañía de una agente policial a la escuela 205 fue atribuida por muchos a la falta de gestión de la funcionaria, quien ya en el mes de diciembre había recibido pedidos para que les proveyera de internet a varios colegios que requerían confeccionar los certificados de egresados de sus alumnos de manera online.

Ante la falta de respuestas, varias autoridades escolares decidieron hacer público su malestar en febrero, lo que derivó en que el jueves 23 el intendente junto a las funcionarias de educación se presentaran en la escuela 205, reclamando ver su documentación administrativa.

El hecho, que motivó que el jefe comunal se tuviera que retirar del colegio en medio de expresiones de repudio, fue interpretado por docentes y dirigentes sindicales como una “represalia” contra la directora por haber hecho públicos sus reclamos.

Crovetto había sido convocada para que asistiera a la comisión de Educación el viernes pasado, pero se ausentó alegando “razones de salud”. Su “faltazo” causó irritación, lo que provocó que los concejales avanzaran con un proyecto de ordenanza que plantea citar al intendente y a las funcionarias del área. El expediente fue aprobado, pero con la condición de que el jefe comunal fuera excluido.

Ese pedido de interpelación fue votado de manera favorable por la oposición y por concejales oficialistas, como fue el caso de los radicales Eduardo Abud y Mario Rodríguez, quienes no ocultan sus críticas contra Crovetto. No obstante el proyecto fue rechazado a Legislación, donde parte del interbloque de Cambiemos hizo prevalecer su mayoría.