Dos hermanos de 19 y 35 años fueron detenidos por vender droga con una peluquería y una planta de pescado que utilizaban como pantalla en el barrio Juramento.

Los operativos, que tuvieron lugar en una vivienda de Diagonal César Gascón al 2400 y en otra ubicada en Calabria al 4400, se realizaron por orden de los fiscales de Estupefacientes, Leandro Favaro, Daniela Ledesma y Pablo Cistoldi, con la habilitación correspondiente del jueza de Garantías Rosa Frende.

Durante los procedimientos la policía se incautó de medio kilo de cocaína sin fraccionar y de alta pureza, cogollos de marihuana, teléfonos celulares, balanzas de precisión, más de dos millones de pesos en efectivo, una escopeta doble caño calibre 16, y una pistola calibre 22 con siete proyectiles en el cargador y uno en la recámara.

Además, fueron secuestrados una camioneta marca Ford Ecosport modelo 2017 y una motocileta marca Bajaj Dominar de 400 cilindradas, que eran utilizadas por los acusados para realizar entregas de drogas bajo la modalidad “delivery”.

La investigación, que se inició en mayo de este año, permitió determinar que los implicados habían montado como pantalla una barbería llamada “Bandidos” en Calabria al 4400 y una falsa planta de procesamiento de pescado sobre Diagonal Gascón, donde en realidad se realizaban maniobras vinculadas al narcomenudeo.

Como resultado, dos hombres de 19 y 35 años, fueron aprehendidos y alojados en la Unidad Penal Nº 44 de Batán, a la espera de ser citados a declarar en Tribunales en el marco de una causa judicial caratulada “Tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y tenencia ilegal de arma de fuego”. Además, una mujer identificada en uno de los sitios allanados será investigada por presunta complicidad.

Al verificar el estado legal del armamento secuestrado, se confirmó que sobre la pistola marca Bersa existía un pedido de secuestro activo por robo en Tandil desde 2023.

Por último, vale agregar que en el operativo también intervino personal de Desarrollo Social del municipio, que procedió al decomiso del pescado hallado en el lugar, que ya fue destinado a comedores comunitarios y entidades de bien público.

Fuentes de la investigación destacaron que, una vez fraccionada y puesta en circulación, la cocaína secuestrada podría haber alcanzado las más de 3.000 dosis en el mercado ilegal.