Por Paola Galano
Con un amor y un respeto por la poesía que la lleva a escribir esa palabra siempre con mayúscula, Evangelina Aguilera teje. Los hilos son Shakira –sí, la cantante–, la poeta colombiana María Mercedes Carranza, las FARC, el Himno Nacional Argentino, la sesión de Bizarrap, el tango Cambalache, citas de varios autores y, entre otros elementos, una reflexión sobre la escritura, la literatura y la poesía. De nuevo la poesía, como si nunca la perdiera del horizonte de sus textos ni de su vida.

“Considero que el mayor límite al que debe aspirar quien escribe Poesía es al de crear una conciencia más despierta y, con ello, a provocar acciones concretas, cambios necesarios en una sociedad aturdida por el consumo y la urgencia”, dijo la escritora.

Los nuevos escritos de la destacada poeta marplatense se pueden leer en “Devenir Colombia”, un libro gratuito que se descarga por Internet y que publicó el sello EOS Villa. Se trata de “una editorial que publica libros digitales de manera gratuita, es de Piero Da Vicari, un escritor de nuestro país, muy generoso”, comentó Aguilera, quien también es docente y correctora.

“Creo que en lo popular siempre se oye un dejo de reclamo, moda y actualidad”

Evangelina Aguilera.

“Las referencias a Colombia se dan a partir de dos mujeres. Por un lado, una cantante muy conocida, Shakira y, por otro, María Mercedes Carranza, una poeta magnífica de ese país que se suicidó en el 2003. Ella publicó cuatro libros de poesía notables y tuvo una vida muy activa en la política y la cultura colombianas”, contó, en una entrevista con LA CAPITAL, sobre la elección de esas figuras del país latinoamericano para sus poemas.

Además, todo el libro está impregnado por los conceptos del filósofo francés Gilles Deleuze, quien es uno de los pensadores más significativos del siglo XX. Esta es una cita de su autoría que abre el libro: “La salud como la literatura, como escritura, consiste en inventar un pueblo que falta”.

El libro se puede descargar de manera gratuita copiando este link en el buscador o haciendo click en el enlace: 

https://drive.google.com/file/d/1Dkt4Hzd5cchi4f6WxNSblGNclqJlcF-w/view

-¿El paradigma de Deleuze te ayudó a pensar el libro?

-Exactamente. La propuesta de Deleuze supone alejarse de cierto pensamiento binario o dicotómico para considerar el rizoma, las líneas de enlace y los puntos de fuga. Creo que es una manera de considerar hechos y conceptos, una forma de analizar donde impera el movimiento, la heterogeneidad, la vida.

-Aparece lo político detrás de figuras como Shakira y María Mercedes Carranza. Ellas te permiten hablar de temas como el hambre, la desigualdad, la injusticia, la guerrilla, los derechos humanos… ¿Lo pensaste así?

-Sí. Es así. Considero que todo texto es político tanto por lo que dice como por lo que omite. No creo que exista arte apolítico. También creo que escuchar la voz de la mujer, que hoy en día tiene una potencia enorme, sirve para pensarnos como sociedad. Por eso mismo elegí dos voces femeninas: una cantante y una poeta. Estas mujeres, bien diversas, transmiten en sus obras ideas y posicionamientos. Me gusta la idea de llevar a la Poesía la figura de una mujer más vinculada al espacio comercial y otra vinculada a la cultura y propiamente al espacio literario y político. En esos mundos tan diversos hay puntos de contacto, expresiones valiosas de ambos lados. No siempre hallamos pensamiento en lo que se crea en los ámbitos académicos. Ni necesariamente es vacuo lo que proviene como propuesta más popular. Sin darle mérito a la frivolidad y a la grosería, cosa que estaría lejos de mi forma de considerar lo artístico. Creo que en lo popular siempre se oye un dejo de reclamo, moda y actualidad.

“El mayor límite al que debe aspirar quien escribe Poesía es al de crear una conciencia más despierta”

-La estructura del libro es la de una trenza de tres niveles: lo anecdótico, lo personal y un tercer nivel formado por una reflexión sobre la poesía, la escritura y la literatura. ¿Cómo apareció esa estructura?

-En este caso, tuve que detenerme especialmente en la forma porque “Devenir Colombia” es, en definitiva, lo que resultó de las clases de un profesor de la Diplomatura en Escritura Creativa (Untref), Iosi Havillio. Este docente magnífico nos llevó a pensar las zonas desde donde escribíamos y nos invitó a transitar otros espacios menos cómodos. Es por eso que, inicialmente, el libro estaba escrito en tres columnas que respondían a esos tres niveles que detectaste.

-Fusionás el Himno Nacional Argentino y el tango Cambalache, ¿podría ser un collage literario?

-Podría y está, entre otros recursos, vinculado a la polifonía que necesitaba crear en la obra. También está el himno de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y el Himno Nacional de Colombia. Esto tiene un porqué, no es la sumatoria por la sumatoria misma. Al incluir el himno de las FARC enlazo con la triste historia del hermano de la poeta, quien fuera secuestrado. De alguna manera, creo, la identidad de un pueblo y de un artista se construye por las acciones mínimas, las microacciones personales, y las acciones y hechos que nos afirman e imponen desde afuera.

-La referencia a Shakira –acaso la colombiana más famosa–, a su historia con Piqué y con Argentina, la mención a su sesión con BZRP me llevan a preguntarte si para vos todo sirve al momento de elaborar un texto poético. ¿Se trata de ensanchar los límites de la poesía?

-No creo que todo sirva en sí para hacer Poesía. Hay una forma de mirar y de decir que sí puede expandirse en tanto que sea útil a un fin estético y de pensamiento. Ahora bien, si se trata de “ensanchar los límites”, considero que el mayor límite al que debe aspirar quien escribe Poesía es al de crear una conciencia más despierta y, con ello, a provocar acciones concretas, cambios necesarios en una sociedad aturdida por el consumo y la urgencia.

-Hay un texto notable, la segunda parte de “Las Casas”, en el que escribís: “Lo que nos mata acá es llamarle vacío al alimento”, escribís. Es una reflexión sobre la abundancia mal entendida en un país como Argentina que acumula cada vez más personas con hambre.

-Como te decía antes, para mí todo texto es político (no estoy diciendo panfletario, se entiende). Y, precisamente, cuando el poemario habla de nuestro territorio, de nuestro precioso y digno país, recuperé de soslayo las zonceras que ya vio, mejor que yo, el genio de Arturo Jauretche: la tontera de pensar que la extensión es un problema o que siempre es mejor lo ajeno. Ese rechazo también constituye la identidad argentina. No por nada estamos como estamos ni por nada nos gobierna actualmente quien nos gobierna.