Un médico de 43 años que había llegado desde Quilmes murió en un departamento céntrico por inhalación de monóxido de carbono.
La víctima fue identificada como Gustavo Fioretti, quien fue encontrado en una habitació fallecido luego de que el portero abriera la puerta por pedido de la policía. “Se acostó con las hornallas prendidas. Todo hace indicar que fue una verdadera tragedia. La primera de este tipo en lo que va del año”, le dijo a LA CAPITAL, el fiscal Fernando Castro.
El hallazgo se produjo hoy a la tarde en un departamento ubicado en avenida Libertad e Hipólito Yrigoyen. Según la reconstrucción de los investigadores, el médico había llegado hace una semana a la ciudad proveniente de Quilmes. En los últimos días, el hombre no mantuvo contacto con su familia, situación que solía ser habitual. Preocupados, desde Quilmes presentaron una denuncia en una fiscalía de esa localidad. A partir de ahí comenzaron las comunicaciones con Mar del Plata y hoy a la tarde efectivos de la comisaría primera llegaron hasta el edificio ubicado en Hipólito Yrigoyen al 1000. “Los policías golpearon la puerta y nadie respondió. Luego llamaron al celular del hombre y escucharon que sonaba en el interior. Ante esto le pidieron al portero que abriera la puerta y cuando fueron hasta la habitación se encontraron con el cuerpo”, reveló Castro.
En el lugar había un fuerte olor a gas y los ambientes no estaban desordenados por lo que desde el comienzo la hipótesis principal fue la de un accidente. Los policías, además, hallaron las hornallas de la cocina prendidas.
De todas maneras, hasta la realización de la autopsia, la causa quedó caratulada como “averiguación de causales de muerte”.