Chi Chi es una perrita labrador de dos años de edad que estuvo a punto de morir adentro de una bolsa de basura. Como muchísimos otros perros en Corea del Sur estaba destinada a convertirse en un plato de comida, ya que en dicha cultura es habitual consumir carne de perro.

Durante mucho tiempo, tuvieron a Chi Chi amarrada por las patas, boca abajo hasta que la atadura empezó a entrar dentro de su piel. La carne de sus patas se infectó tanto que pudrió sus huesos por lo que ya no era funcional para los comerciantes.
Por esta razón la desecharon como basura en una bolsa de plástico. Una organización, ARME (Animal Rescue Media Education) se enteró de la historia gracias a un grupo de bienestar animal de Corea del Sur llamado Nabiya Irion Hope Project. Los miembros de dicho proyecto encontraron a la perra en un tarro de basura de una zona muy conocida por los sacrificios animales que se realizan.
Chi Chi fue llevada de urgencias a un hospital, donde desafortunadamente, para que sobreviviera, tuvieron que amputarle sus cuatro patas. Pero a pesar de todo lo que ha tenido que soportar, ella tiene un deseo inmenso de seguir viviendo. Actualmente gente especializada está ayudando para su recuperación.
Y cuando esté cómoda caminando con sus nuevas patas, estará lista para viajar a Arizona donde la espera su nueva familia.