El sucesor, Alejandro Amoedo, ya es oficialmente el nuevo presidente del Club Atlético Peñarol. Luego de 21 años consecutivos de gestión, el legendario Domingo Robles dio un paso al costado.

En la última Asamblea de Robles como máximo mandatario del club, con numerosos socios presentes y un clima de emoción, se aprobaron los balances y se renovaron autoridades.

Además de Alejandro Amoedo (presidente), la nueva comisión directiva quedó integrada por Nicolás Lauría (vicepresidente), Marcelo Laganá (secretario), Natalia García (prosecretaria), Darío Arcidiácono (tesorero), Gonzalo Vicente (protesorero); Fabián Ferencak, Lisandro Ciarlotti, Bruno Miño, Matías Muzzio, Juan Gauna y Mariano Bugnar (vocales); Luis Álvarez, Gustavo Ferullo, Jorge González, Joaquín Martínez, Jorge Baino y Jonatan D’Adamo (vocales suplentes); Antonio Fernández y José Fernández (revisores de cuentas) y Fernando Pérez, Luciano Valentino y Daniel Sirochinsky (revisores de cuentas suplentes).

“Celebro que haya tantos socios, es la Asamblea con más participación desde que yo estoy. También celebro que se haya conformado una lista de unidad. En Peñarol tenemos que estar juntos e ir por el mismo camino”, dijo Robles, emocionado, en sus primeras palabras.

Robles remarcó dos etapas muy difíciles, como en 2001, con el país destruido y un club afrontando un montón de juicios, y en 2020, con la pandemia, cuando la Liga se jugó en burbujas y hubo que afrontar gastos de hoteles y departamentos vacíos sin recupero de recaudaciones, venta de abonos ni publicidad en cancha.

En ese sentido indicó estar “muy orgulloso y el club queda en buenas manos, aunque todos tienen que aportar más que cuando estaba yo, porque es una tarea muy difícil. No queda ningún juicio por afrontar y eso tiene que ser un legado”, afirmó.

El flamante sucesor, Amoedo, aseguró que “se va el mejor dirigente el país, el amigo, el tipo que nos hizo felices, que nos permitió soñar que podíamos llegar a lo más alto y lo hizo realidad. Lo disfrutamos todos”.