Cultura

Balance literario: un repaso por los libros marplatenses del 2025

Escritas por marplatenses, ambientadas en la ciudad o editadas por sellos locales, un recorrido por las publicaciones de este año. De la narrativa y la poesía al ensayo, la no ficción, la historieta y los relatos infantiles, la cantidad y calidad de los textos confirman la diversidad del movimiento literario local.

Por Félix Lencinas y Rocío Ibarlucía

El 2025 fue un año prolífico para la literatura marplatense. De la poesía al fantasy, de la novela histórica a la no ficción, los libros publicados este año dan cuenta de una ciudad que produce literatura, y que se piensa y se narra a sí misma. Mar del Plata aparece como escenario –el mar y el barrio, la postal turística y la ciudad fuera de temporada– y como comunidad activa de autores, editoriales independientes y universitarias, editores, libreros y lectores que sostienen una producción diversa y en expansión.

A continuación, un mapa propuesto por LA CAPITAL de los libros marplatenses del año, organizados por géneros.

Ensayo

El ensayo ocupa un lugar central entre los libros marplatenses del año. Una de las novedades más destacadas del 2025 ha sido “Jorge Luis Borges. Curso de Literatura inglesa y norteamericana. Universidad de Mar del Plata, 1966” (Sudamericana), editado por Mariela Blanco, docente e investigadora de la UNMdP, y notas de Germán Álvarez. El volumen recupera las clases que Borges dictó en 1966 en la entonces Universidad Católica de Mar del Plata, a donde viajaba quincenalmente para dar un curso a menos de una decena de estudiantes, que luego se convertirían en la primera camada de profesores locales en Letras. El libro permite acceder a la perspectiva de Borges sobre autores como Chaucer, Shakespeare, Dickens, Stevenson y Chesterton, entre muchos otros, y recuperar el registro vital de su voz en el aula, con su estilo, cadencia y humor.

Otro valioso aporte a los estudios históricos y culturales sobre nuestra ciudad fue “Cine, estrellas y peronismo” (Futurock) de Ela Mertnoff, quien reconstruye el detrás de escena del primer festival de cine de Mar del Plata, en 1954. La famosa foto de Perón mirando una película con anteojos 3D en una sala de la ciudad es el puntapié para analizar el gobierno peronista, la cercanía del golpe del 55, la relación de la industria cinematográfica con el Estado, y el vínculo de las estrellas con la política. Otro imperdible.

Por otro lado, Eudem, la editorial de la UNMdP, amplió su catálogo con “Antes de Mar del Plata”, de Daniel Reynoso, que forma parte de la colección “Mar del Plata entre el mar y la pampa”. El libro propone una mirada alternativa sobre los orígenes de la ciudad: retrocede hasta el siglo XVIII para reconstruir los procesos previos a la fundación de 1874 y analizar cómo el pequeño poblado fundado por Peralta Ramos se transformó en un centro urbano clave del país.

Entre las numerosas publicaciones de Eudem, también se destacó la colección Esa Plaga de Polleras, que sumó su séptimo volumen sobre Gabriela Mistral, con textos poco conocidos y ejercicios para el trabajo en las aulas, en línea con el espíritu de la colección, que es acercar a las escuelas la obra de pioneras en la reivindicación de los derechos de las mujeres. Además, Esa Plaga de Polleras también publicó este año por el sello independiente local Es Pulpa un volumen con cartas entre Juana Manso y Mary Peabody Mann.

El escritor, médico y librero marplatense Sebastián Chilano publicó “Cuatro variaciones sobre el mar” (Qeja), un breve pero profundo ensayo que explora la compleja relación del ser humano con el océano a través de metáforas, símbolos y referencias literarias. El carácter sublime e inagotable del mar, su misterio y su presencia en mitos, en la poesía y en la memoria personal y colectiva son algunos de los rasgos que el autor describe con fascinación, profundidad filosófica y sensibilidad lírica.

Y no puede faltar la mención de “Kafka” (AZ Editora), un recorrido del prolífico marplatense Matías Moscardi por la obra del escritor checo, pensado tanto para lectores primerizos como para quienes ya lo frecuentan, con un estilo accesible y agudo, apoyado en ejemplos del cine, la literatura y la filosofía.

Narrativa

En el mundo de la narrativa, hubo algunos autores que trabajaron con el cuento, pero muchos más con la novela. El 2025 mostró una producción marcada por las ficciones históricas, las protagonistas femeninas y la exploración de los vínculos, con historias que van del conflicto interior a los grandes acontecimientos colectivos.

Dante Galdona publicó “La conversión del señor Tramayo” (Bucanera), una novela centrada en la transformación interior de un hombre común cuya vida se quiebra ante una revelación inesperada. En su primer día como jubilado, Tramayo se enfrenta a una peripecia del destino que lo obliga a mirarse a sí mismo, a revisar sus creencias y rutinas, y a preguntarse quién es en definitiva.

Hubo varias novelas con mujeres como protagonistas, como es el caso de “El mar en el que me hundo” de Carolina Favini, quien presenta a una mujer que se debate entre sometimientos y frustraciones semejantes al abismo. ¿Cómo integrar esos fragmentos de mujer rota?, es una de las preguntas que abre esta ficción.

Otra gran protagonista femenina se puede encontrar en “La cruzada” (Planeta) de Florencia Canale. La exitosa escritora nacida en Mar del Plata se apropia de las memorias de Catalina de Erauso, la monja que escapa de un convento vasco a los quince años y, vestida de hombre, viaja a América para combatir en los ejércitos españoles, en pleno siglo XVII. Una novela atrapante que narra la vida de la monja alférez sin moralismos ni etiquetas, con la que Canale se aleja por primera vez de su amado siglo XIX.

Otra gran ficción histórica protagonizada por una mujer ha sido “El secreto de Azucena” (Plaza y Janés), en la cual la reconocida marplatense Gabriela Exilart recupera la masacre de Tata Dios, ocurrida en Tandil de 1872, cuando 36 inmigrantes fueron asesinados brutalmente por un supuesto enviado divino. Racismo, fanatismo religioso, los entramados de poder en la Justicia, la Iglesia y la política y el rol social de las mujeres a fines del siglo XIX son parte de esta trama que conmueve no solo por lo que cuenta sino por cómo lo cuenta.

“Las caídas” (Caburé), último libro de Carolina Bugnone, marplatense por adopción, se sumó a la serie de publicaciones recientes con protagonistas mujeres. En los quince cuentos que constituyen este volumen, los personajes femeninos están atravesados por pequeñas tragedias y por vínculos donde la fragilidad convive con la violencia, el abuso y la locura.

Este 2025 la autora marplatense de novelas románticas Laura G. Miranda propuso “Ellos” (VR), en la cual los protagonistas varones toman la palabra. Su texto ofrece una mirada sobre el universo masculino a través del humor, la perplejidad, la empatía y una amistad a prueba de adversidades.

Siguiendo con las ficciones que recuperan personajes históricos, Franco Dall’Oste presentó “Cinco cuentos sobre Facundo Quiroga y su cobarde asesino Santos Pérez” (Caburé), en los cuales desmonta la maquinaria del heroísmo y la cobardía que rodea a estas dos figuras emblemáticas de la Argentina.

La guerra de Malvinas y el Mundial ‘86 son el escenario de “Somos el mismo”, del periodista marplatense Carlos Crespo, quien narra la vida de un excombatiente que llega a jugar la Copa del Mundo. Una novela que concibe la escritura como forma de comprensión y memoria.

No aborda un hecho histórico puntual, pero el realismo de La máquina de hacer feliz” (Caburé), primer libro de cuentos de Alejandra Dabel, nos presenta una serie de personajes que, en diversos contextos, buscan la felicidad. Sus cuentos exponen las múltiples caras de nuestra sociedad: la pobreza, la soledad, el paso del tiempo, el crimen, la guerra, la religión y la política. Una invitación a reflexionar sobre la condición humana.

Mundos alternativos

Para quienes buscan sumergirse en realidades paralelas, la narrativa del 2025 ofreció una serie de libros que exploraron mundos alternativos, futuros distópicos y universos fantásticos sin dejar de dialogar con los conflictos de nuestra sociedad.

Un ejemplo es Diez canciones para volver a casa (La Flor Azul), un fantasy juvenil de Esteban Prado, situado entre los eucaliptos del Bosque Peralta Ramos. Allí el joven protagonista se topa con criaturas que lo conducen a un mundo mágico y desconocido, donde la música de la naturaleza es primordial. Un libro que invita a “recuperar el oído y sumergirnos en los cosmos que nos rodean”, algo que muchos adultos hemos dejado de ejercitar.

También con impronta marplatense, esta vez desde su editorial EyH, Hernán Montenegro lanzó “Cónclave carmesí, que se enrola en la literatura vampírica y la fantasía urbana. El autor local narra las tensiones del poder y la fragilidad de las lealtades dentro de un mundo oculto, regido por reglas estrictas y alianzas inestables.

Pablo Lendero, por su parte, debutó en la ficción con Las mareas de Stentor”, una obra que fusiona temas históricos y sensibles, como el genocidio Ona y los vuelos de la muerte, con elementos fantásticos. Su objetivo ha sido acercar a las nuevas generaciones a temas complejos y dolorosos, fomentando la empatía.

En el universo de la ciencia ficción llegóUn mundo como este” (El gato y la caja) de la marplatense Catalina Méndez, quien narra el intento de un equipo por hacer contacto con extraterrestres desde un observatorio astronómico en el medio de un salar en Jujuy.

También en la línea de la ciencia ficción y la distopía, Clara Andrade escribió “Los cuidados invisibles”, que reúne tres relatos ficcionales vinculados con el fin del capitalismo y una nueva era en la que sobrevivir implicará hibridarse con otras especies. El libro se articula con la obra de danza-teatro homónima de la Compañía Quantum que formará parte de la cartelera teatral de esta temporada.

Otro mundo alternativo es la isla ficcional que hace de escenario en Wilson” (Bucarest) de Mauro De Angelis. Allí somos testigos de las memorias de Edmundo Wilson, un ministro de un gobierno en decadencia, que desde el exilio hace una reflexión sobre los pormenores del poder. Una sátira política que llevará a sus lectores a discutir la actualidad.

No ficción

La no ficción marplatense del año se caracterizó por la hibridez de formas y registros: crónicas, diarios, apuntes y relatos que dialogan con procedimientos de la novela y ponen en primer plano el territorio marplatense o la experiencia personal como materia de reflexión.

Uno de estos libros de no ficción con fuerte anclaje en la ciudad fue “La tragedia del Rigel y otras crónicas” (Cepes), de Ezequiel Casanovas. Mediante una rigurosa investigación periodística y su potencia narrativa, el autor construye cinco relatos que abordan hechos dolorosos de la historia local, que van desde la última dictadura hasta episodios de violencia de género y explotación laboral.

Por su parte, “La danza de la vaca”, de Esteban Prado, apuesta a una narración fragmentaria construida a partir de relatos breves, fotografías, apuntes y escenas de la vida cotidiana para contar sus mudanzas por distintos barrios de la ciudad, vínculos familiares, amistades, amores y distintas formas de precariedad y violencia urbana. Realizada a mano con materiales reutilizados, la obra celebra los diez años de la Oficina Perambulante.

En cuanto a los diarios, se destacó la publicación deRecién llegada” (Beatriz Viterbo) de Agustina Catalano, un libro que narra su viaje de trabajo a Alemania durante tres meses sin su hijo de dos años. Con humor y lucidez, indaga en la maternidad y las tensiones persistentes entre la culpa y el deseo.

Novela gráfica

Este 2025 el sello editorial El Gran Pez lanzó su quinto libro que resulta de especial interés para la historia de la ciudad. Se trata de “Gómez. Improbables aventuras de un fotógrafo en Mar del Plata”, del arquitecto Gustavo Diéguez, una novela gráfica que rescata a Manuel Gómez Piñeiro, fotógrafo que documentó como pocos la arquitectura moderna argentina en los años 40. Con rigor histórico, humor y parodia, el volumen propone una Mar del Plata que se convierte en una de esas ciudades en la que nos hubiera gustado vivir.

Este año el ilustrador marplatense Juan Carlos Quattordio lanzó las novelas gráficas “Ojo en el cielo” y “La disquería del infinito”, que fusionan la ciencia ficción, el mundo del rock y del heavy metal y el culto a la amistad para rescatar el espíritu de los libros de fines del siglo XIX.

Además, este diciembre se presentó “Fuera de temporada. Una antología marplatense”, una obra colectiva elaborada por ocho ilustradores locales, quienes, desde distintos estilos, crearon historias que transcurren en una Mar del Plata íntima, cotidiana y lejos de las postales turísticas.

Poesía

La cantidad de títulos de poesía publicados confirma a este género como un territorio especialmente prolífico en Mar del Plata. Dentro de esa producción, el mar emerge como un motivo recurrente en al menos tres poemarios recientes. En “Cartografía imprecisa” (Cepes), Emilio Teno parte de su fascinación por la navegación y por los primeros cartógrafos para construir un libro atravesado por la tensión entre el deseo de ordenar el mundo a través de mapas y la imposibilidad de abarcarlo en su totalidad.

El mar también vertebra Lengua salada” (Halley), de Romina Tiritilli, una biografía poética organizada en secciones que imitan el movimiento del agua y avanzan como una marea cambiante, desde la cual la autora piensa su vida y su escritura.

A esta serie marítima se suma Otras aguas“, de la marplatense Aly Corrado Mélin, un poemario donde aparece una ciudad menos luminosa y feliz que lo que indica su apodo turístico y un paisaje acuático mutante –a veces mar, a veces río, marejada o agua quieta– que se convierte en materia poética.

Por otro lado, en 2025, la poesía socialmente comprometida también tuvo una producción fértil y diversa. La dimensión política aparece de modo explícito en Devenir Colombia”, de Evangelina Aguilera, un libro digital y gratuito que entrelaza arte popular y culto –de Shakira a la poeta María Mercedes Carranza– con reflexiones sobre la escritura, la historia latinoamericana y los conflictos sociales. Vale subrayar que Aguilera publicó también este año “Primera reunión”, volumen que reúne siete de sus libros escritos entre 2014 y 2024.

Crónica del incendio (Halley) es otro libro que construye una poesía de denuncia social. Maité Molina escribe poemas que giran alrededor de la crisis del 2001, construidos a partir de comentarios familiares y que ahora narra desde diversas voces populares.

Un destacado en poesía del 2025 también ha sido “Bocapájaro”, un libro que recupera poemas inéditos de María del Carmen “Coca” Maggi, secuestrada en 1975 y asesinada durante la última dictadura. Impulsado por la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, el volumen restituye una voz poética silenciada, donde la poesía se vuelve también acto de justicia y memoria.

Desde otro registro, María del Mar Rodríguez presentó su fanzine “Estimada Luna Punk”, que pone en el centro del poemario a las calles marplatenses y a sus personajes marginales: un grupo de escritores pobres recorren la ciudad en busca de una bestia oculta y trazan, de este modo, una cartografía urbana lejos de la postal marítima.

Por otro lado, desde una experiencia vital intensa, Laura Blanco publicó “Mirada puente (Halley), un poemario que da voz a una madre que muta de piel para parir, criar, enseñar, proteger y sostener. Frente al agotamiento, los miedos y el dolor provocado por la enfermedad de uno de sus hijos, la escritura poética se vuelve refugio y liberación.

Literatura infantil

La literatura para niños y niñas también tuvo una producción destacada a nivel local. En 2025, Matías Moscardi presentó “Marina Maravilla en busca del tiempo perdido” (AZ Editora), continuación de la saga protagonizada por una niña que viaja a otra dimensión para escribir una novela maravillosa. En esta segunda entrega, Marina debe salvar al universo mientras enfrenta la fama repentina y un bloqueo creativo, en una aventura que combina lecciones de narrativa y budismo zen con clases de surf, cohetes, pochoclos, flechas y armaduras samurái.

A su vez, Moscardi publicó “Una temporada en Charlandia” (Ralenti), ilustrado por Jimena Tello, que tiene como protagonista a un nene que charla todo el día sin parar, por lo que sus padres lo mandan a una colonia de vacaciones en Charlandia, el planeta de los charletas. Un libro escrito en su mayoría bajo el dígrafo ‘ch’, para chicos y chicas de 4 a 8 años, ideal para leer y reír en voz alta.

También se destacó la antología “Vienen con cuentos”, realizada en conjunto por la editorial local Letra Sudaca y la ONG Jitanjáfora, que reúne relatos de diversos autores con ilustraciones de Paula Rivera y celebra lo cotidiano, lo fantástico y la sensibilidad del mundo infantil. A este panorama se suman otros títulos como “Che… bichitos” y “Che… colores”, de Hebe Games; “Ufa”, de Gabriela Bujarski y Leo Mosiewicki, que ofrece herramientas lúdicas para trabajar las emociones en la infancia; y “Morita”, de Romina Giugno, una historia narrada con ternura sobre el proceso que atraviesan los niños cuando sus padres se separan.

***

Ya sea desde la memoria histórica, la ficción, la experiencia íntima o la reflexión ensayística, los libros publicados en 2025 confirman que Mar del Plata no es solo un escenario recurrente de la literatura, sino un espacio vivo de producción cultural. Una ciudad que escribe, edita y lee para volver a escribirse año tras año, a través de una diversidad de registros y estilos, lejos de las etiquetas turísticas y en permanente expansión. Este recorrido espera ser una invitación a descubrir a los autores que escriben desde o sobre nuestro territorio.

Te puede interesar

Cargando...
Cargando...
Cargando...