El primer fin de semana largo de la temporada 2020/2021 dejó un saldo favorable en Mar del Plata, incluso por encima de las expectativas que había hasta hace unos días. Con el arribo de más de 100.000 turistas la ocupación fue mayor a la esperada y en los hoteles y balnearios hubo sorpresas, tanto por la cantidad de gente como -en general- por el acatamiento de los protocolos por parte de los visitantes, que por estas horas disfrutan de las últimas horas de descanso en la ciudad.

Coincidieron varios factores. La reapertura del turismo estuvo signada por un fin de semana extra largo, pero también por los controles desplegados y sobre todo el buen tiempo, con temperaturas agradables para disfrutar de los espacios al aire libre.

El movimiento se sintió en las playas, el tránsito, la demanda en los comercios y locales gastronómicos y también en la ocupación de las plazas hoteleras y el alquiler de carpas y sombrillas, con una marcada demanda “espontánea”.

En los hoteles las demandas crecieron en las horas previas al fin de semana. “Entró mucha gente a último momento y la ocupación mejoró sensiblemente”, indicó Eduardo Palena, vicepresidente de la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica.

En general trabajaron mejor los establecimientos de cuatro y cinco estrellas, pero la demanda en cierto punto fue pareja y el movimiento colmó las expectativas de los hoteleros, que viven un fin de semana con buena ocupación.

“Ha sido un buen fin de semana teniendo en cuenta la situación”, agregó Palena y advirtió que “la gente fue muy respetuosa con el protocolo” establecido en el marco de la reapertura de los hoteles.

En los balnearios, en tanto, todo estuvo dado para que el fin de semana también fuese positivo. Desde el sábado el buen tiempo -con temperaturas de hasta 25 grados- se instaló en la ciudad, factor determinante para disfrutar de las playas.

“Hemos tenido un buen fin de semana. Personalmente estoy contento con el movimiento pero también con los controles y con el comportamiento de la gente, que ha respetado los protocolos y el distanciamiento”, indicó Jorge Riccilo, titular del balneario “Perla Norte” y a su vez responsable de la Cámara de Empresarios de Balnearios Restaurantes y Afines.

Riccilo aseguró que en este fin de semana hubo una “buena” ocupación de los espacios de sombra y destacó que “volvió a haber alquileres por día”.

“Trabajamos bien con la gente de Mar del Plata, con familias que han alquilado por día y otras que ya alquilaron su carpa para toda la temporada, hay hay mucha gente que todavía no se decidió y lo está evaluando”, agregó el responsable del balneario ubicado en el norte de la ciudad.

“Este año hemos vivido situaciones muy difíciles y es importante la vuelta del turismo. Si nos cuidamos y cuidamos al otro, la gente acompaña. Hay que entender que es fundamental el respeto de los protocolos. Tenemos muchas ganas de trabajar y que a Mar del Palta le vaya bien”, analizó Riccillo.

Por su parte, Nicolás Parato, uno de los responsables del Torreón del Monje e integrante de la Cámara de Balnearios, indicó que el fin de semana “se trabajó muy bien” en la mayoría de las unidades turísticas y precisó que el domingo “fue más positivo que el sábado”.

El empresario destacó también que “hubo alquileres diarios por primera vez en lo que es el inicio de temporada” y que a su vez “los clientes por temporada comenzaron a utilizar sus unidades de sombra”.

Aclaró que “la demanda fue pareja” en la mayoría de los balnearios, tanto en el norte como en el centro de la ciudad y la zona sur.

Piletas

El protocolo dispuesto para la actividad de los balnearios fija una serie de restricciones. Además de no ofrecer duchas y naturalmente pedir que se respete el distanciamiento social y el uso de tapabocas en los espacios comunes, se aplicó el aforo en las piletas, uno de los atractivos más solicitados y elegidos por quienes alquilan sus espacios de sombra.

Para el uso de las piletas la recomendación general es que funcionen al 50% de su capacidad. La disposición fue controlada en la mayoría de los balnearios este fin de semana, donde los guardavidas son en general los encargados de regular el uso de las piletas para evitar desbordes.

Más allá de la situación de desobediencia de los protocolos que se dio en torno a la pileta del balneario 12 de Punta Mogotes, donde ya tomaron cartas en el asunto Municipio y la Provincia, en general “el comportamiento de la gente estuvo dentro de lo esperado” y “donde los guardavidas pidieron reducir la cantidad de personas dentro, la medida fue acatada sin inconvenientes y con mucho respeto”, indicaron desde uno de los balnearios de La Perla.