Contra todos los rumores y suposiciones, Darío Franco no oficializó su renuncia y, según aseguran en su entorno, no tiene pensado hacerlo en lo inmediato. De hecho su cuerpo técnico tiene programada la semana de trabajo y lo hizo saber tras el partido marcando algunas pautas.

La dirigencia, de momento, no tomó la decisión de cortar el ciclo. Hacerlo unilateralmente le significaría tener que pagarle al cuerpo técnico de Franco todo un contrato que vence en junio de 2018. Por eso necesitaría una salida de común acuerdo.

De todos modos, tampoco en la cúpula dirigencial parecen tener en claro que la salida al mal momento sea cambiar la conducción de la cabeza del grupo. Claro que los teléfonos ya sonaron y hubo averiguaciones. Ricardo Zielinski, que desde hace algunas semanas aparecía en la lista de los dirigentes, parece haber perdido terreno por una cuestión presupuestaria.

Ricardo Caruso Lombardi es otro que siempre “coqueteó” con Aldosivi y que no tiene problemas en tomar un fierro caliente en situaciones de peligro de descenso. De hecho su carrera en Primera División la forjó con el rótulo de “salvador”. Pero en las últimas horas surgieron otros nombres con dilatada trayectoria. La lista crece semana a semana al compás de las derrotas.

Algunos miraron a Carlos Orsi, el entrenador de la Reserva y coordinador de todo el fútbol infanto juvenil del club. Pero el ex River y San Lorenzo, de buen trabajo en las divisiones inferiores de la entidad portuense, no estaría interesado en tomar el equipo de Primera División.

Este domingo por la noche los dirigentes estarían reunidos analizando la situación y los pasos a seguir. Habrá que ver si los “popes” aparecen en la práctica de este lunes (convocada para las 9.30) para anunciar una decisión o bien le renuevan la confianza a Franco.

Previamente, tras la derrota, jugadores y cuerpo técnico se reunieron en el vestuario. Allí estuvo presente el vicepresidente José Marcelo Moscuzza y otros integrantes de la Comisión Directiva. El presidente del club, José Américo Moscuzza, no ingresó al camarín.

Al salir del vestuario, ni Darío Franco ni los jugadores hablaron con la prensa y se subieron al micro que, con una imponente custodia policial, esperó en el playón externo que da a la calle Ortíz de Zárate para trasladar a todos al hotel en donde habitualmente concentra el plantel. Allí sí los jugadores se retiraron a sus domicilios particulares.

Los hinchas, que habían mostrado su bronca durante el partido con insultos varios, pedido de que se vayan todos y un coro de silbidos tras el pitazo final, no aparecieron por la zona y los jugadores pudieron partir del estadio José María Minella con relativa tranquilidad. Algunos aseguran que en las próximas horas podría haber una “visita” de algunos barras al Predio Deportivo para “pedir explicaciones”. Habrá que tomar recaudos.

No son pocos los jugadores que ven con buenos ojos la posibilidad de un cambio. Es que la relación con el cuerpo técnico se ha desgastado en las últimas semanas. En ese sentido, se sabe, los malos resultados no ayudan. Y los múltiples cambios de un partido a otro tampoco…

Por lo pronto este lunes a las 10, si las condiciones climáticas lo permiten, Aldosivi y Huracán animarán el partido de Reserva en el Predio Deportivo.

La derrota ante Huracán fue la sexta seguida de este Aldosivi, que previamente había caído ante Temperley (0-1), Estudiantes (1-4), Gimnasia (0-1), Newell’s (0-3) y Rosario Central (0-2). Y la tercera vez al hilo que pierde por tres goles de diferencia jugando como local.

Los siete partidos que le quedan al elenco portuense son durísimos. El doble enfrentamiento con Olimpo, rival directo en la lucha por la permanencia (el sábado en Bahía Blanca y en la última fecha en el Minella) y en el medio los duelos ante los cinco grandes.

Primero llegará la visita a San Lorenzo en el Bajo Flores, luego será el turno de recibir a Independiente, visitar a Racing, el duelo con Boca en el Minella y frente a River en el Monumental.

Este domingo debutó oficialmente en la Primera División de Aldosivi el delantero marplatense Jonatan Benedetti, quien se había mostrado algunos minutos en el amistoso de verano ante Boca. El pibe ingresó cuando el partido ya estaba demasiado cuesta arriba y no tuvo la chance de lucirse. Si Franco sigue al frente del equipo tendría mayores chances en los próximos partidos.

En cambio, reaparecieron tras recuperarse de sendas lesiones musculares Cristian Llama y Pablo Lugüercio, otros dos que ingresaron en el complemento.