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Policiales 17 de julio de 2025

Disponen la extradición del turco detenido por estafa en Mar del Plata

La Justicia Federal local no hizo lugar al planteo defensista de Guven Calisir, quien en febrero había sido atrapado en la Estación Ferroautomotora. La noticia había sido publicada en ese momento por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich en sus redes sociales.

La Justicia Federal de Mar del Plata dispuso la extradición del ciudadano de origen turco que había sido detenido por estafa en la Estación Ferroautomotora en febrero pasado.

El juez Santiago Inchausti hizo lugar a la presentación de la fiscal Laura Mazzaferri, quien consideró que los planteos defensistas de Guven Calisir, cuya presencia en Turquía es reclamada en el marco de un juicio por el delito de fraude, no tenían fundamentos.

Más precisamente, la investigadora se refirió a los planteamientos que Calisir hizo en los últimos meses ante la Justicia local, cuando manifestó ser “kurdo” y denunció que las autoridades de su país ejecutaban una persecución de “carácter político” con el “propósito de silenciarlo por sus ideas, identidad y creencias”.

Según el documento judicial al que pudo acceder LA CAPITAL, el joven de 23 años manifestó que por ha sufrido “discriminación y persecución” y que “este proceso se basa en una supuesta estafa con un daño económico muy bajo, que todo daño ha sido reparado económicamente, que la víctima retiró su denuncia y a pesar de eso, el delito prevé  una pena de prisión desproporcionada, encubriendo fines políticos”.

Por otra parte, Calisir “alegó ser paciente con diabetes tipo 1, motivo por el cual debe suministrarse insulina varias veces al día y en caso de ser extraditado en Turquía,  existe probabilidad de ser detenido y en prisión no podrían brindarle el tratamiento adecuado, configurando ello una amenaza vital, comprometiendo su salud en caso de interrumpir el tratamiento”.

En su alegato, el joven solicitó refugio ante nuestras autoridades: refirió que vivía en Argentina hace dos años, que hizo raíces en esta tierra, que trabaja y tiene proyectos emocionales, planea una vida familiar aquí deseando ser padre a partir del vínculo que lo une con su esposa argentina, que no tiene malas intenciones y que quiere trabajar y concretar sus proyectos en el país. Sumado a ello, dijo que siempre estuvo ajustado a derecho, y pidió una oportunidad, bajo el expreso deseo de no ser extraditado.

La fiscal Mazzaferri manifestó, por su parte, que los fundamentos que presentó Calisir no fueron acompañados de pruebas y que el delito por el que se lo juzga en Turquía y de los tratados bilaterales firmados entre ese país y la Argentina surge que su situación proceso se ajusta a un proceso normal y cuya conclusión natural y obligatoria es la extradición.

En ese sentido, el juez Inchausti consideró correcta la postura de Mazzaferri y en las últimas horas dictó el fallo que dejará a Calisir a disposición de el personal de Coordinación de Extranjeros Detenidos, de la Dirección Nacional de Migraciones, primero, y del Tribunal Penal Superior Nº 1 de Bolu, Turquía, después. En tanto, ordenó que se ponga “en conocimiento del Estado requirente el tiempo de detención cumplido en nuestro país por parte del requerido, debiendo practicar su cómputo una vez firme la presente”.

De todas formas, la defensa apeló la sentencia y ahora la decisión final sobre la extradición de Calisir la tendrá la Corte Suprema de Justicia.

El caso

Guven Calisir fue detenido el 8 de febrero pasado cuando arribaba en colectivo a la estación Ferroautomotora. El sujeto, de 23 años, era buscado por Interpol bajo una “Placa Roja” por el delito de defraudación mediante sistemas de procesamiento de datos, bancos o instituciones financieras.

El procedimiento fue llevado a cabo por la Policía Federal Argentina y según información oficial el prófugo arribó a la ciudad en un ómnibus de larga distancia durante la madrugada. Entonces, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, publicó la noticia en su cuenta de X.

 

En el posteo, la funcionaria le adjudicó al hombre “una millonaria defraudación” pero luego, según la Justicia, se comprobó había estafado a una mujer en la falsa compra de un iPhone 11 por 6 mil liras turcas, lo que equivale aproximadamente a 157 dólares.

Tras verificar su identidad mediante los sistemas informáticos de la fuerza, los investigadores confirmaron la orden de captura internacional vigente. Ante esta situación, el Juzgado Federal N° 3 de Mar del Plata, a cargo de Santiago Inchausti, dispuso la detención del hombre y su traslado a la sede local de la PFA, donde quedó alojado.

Al parecer, el caso se produjo el 11 de abril de 2022, cuando la víctima acordó con el supuesto dueño de un iPhone 11 la compra del teléfono por internet y le transfirió la suma de 6 mil liras turcas como adelanto a una cuenta bancaria. Cuando se consumara la transacción, debería entregarle 1200 liras turcas más. Pero nunca ocurrió: el vendedor del aparato dejó de contestarle los mensajes y desapareció.

La mujer hizo la denuncia e Interpol emitió un alerta internacional que finalizó con la captura del sospechoso en Mar del Plata. Ahora, según los documentos a los que pudo acceder LA CAPITAL, la Justicia Federal le denegó la excarcelación debido a que el detenido dio datos confusos respecto del domicilio argentino en el que debería aguardar la resolución de los trámites de extradición y eso llevó a los investigadores a examinar que existiría un potencial peligro de fuga si recuperara su libertad.