por Marcelo Solari

Había empezado bien Quilmes. Metió 25 puntos en el primer segmento y disfrutaba. Pero sólo pudo anotar 36 en los tres restantes. Ferro Carril Oeste de General Pico le hizo sentir el rigor de una durísima defensa y lo derrotó por 74 a 61, por la Liga Federal de Básquetbol.

El primer tiempo tuvo dos mitades bien disímiles. Quilmes se adueñó de la primera, con buen juego de pases hasta encontrar un buen tiro abierto, y puso empeño en defensa para capitalizarlo en transiciones veloces.

Ferro, que inició con una formación infrecuente, protegió muy bien el juego interior, y al “tricolor” le costó hacer pesar a Axel Marino. Sin embargo, con un certero Thiago Ghietti (15 puntos en los dos primeros cuartos) y sus buenas respuestas atrás, sacó 10 de ventaja varias veces en el cuarto inicial.

La entrada en acción de varios de los habituales titulares en Ferro hizo cambiar de manos el juego. La visita propuso un juego muy físico, al borde del foul, clausuró los caminos hacia su canasto y Quilmes se vio obligado a tirar de afuera, sin éxito.

Sus porcentajes se desmoronaron, estuvo 6m20s sin anotar punto alguno, y Ferro generó problemas con la carga al rebote ofensivo, hasta llevarse un resultado a favor al entretiempo.

Al reiniciar, el que provocó el quiebre fue Ferro, con un gran Rodrigo Lavezzari para sacar una buena renta de 45-33. Le costaba anotar al local, aunque una buena ráfaga de Matías Dominé lo sacó del letargo y le permitió acortar parte de la desventaja.

De todas maneras, el arranque fulgurante de Ferro casi que definió el pleito en el amanecer del cuarto decisivo. Quilmes continuó con sus problemas para anotar, y cada réplica en velocidad fue una estocada que causó mucho daño (58-43). Ferro tuvo mucho más oficio, administró con criterio la ventaja y se encaminó sin problemas al triunfo.