Por Claudia Roldós

“Mujeres resilientes: historias que inspiran fortaleza y esperanza ante la adversidad” es el nuevo libro del periodista y escritor Alejandro Gorenstein.

Se trata de 17 historias de mujeres de todas las edades que superaron diversas situaciones traumáticas y salieron fortalecidas.

No es la primera incursión de Gorenstein en el tema de la Resiliencia. Desde hace varios años se encuentra a la búsqueda de historias de superación desde distintos puntos de vista: chicos y jóvenes, profesionales de la salud, contadas en Resiliencia: Médicos más allá de la adversidad”, “Historias de corazón: chicos que le ganaron a la vida!” y “Vidas que enseñan”.

En esta oportunidad, se centró en historias de mujeres porque “tienen una fortaleza innata que las caracteriza, pero a la vez son más sensibles y están más dispuestas a hablar de lo que les pasa” y porque “son las que alzan la voz de mando a la hora de pedir justicia, las que se juntan entre pares para poder escucharse, entenderse e identificarse”.
Sobre el denominador común de las historias, el autor destacó en una charla con LA CAPITAL que “en todas aparece esto de encontrarle un sentido a la vida, hacer algo para transformarse y, en muchos casos, ayudar a transformar a los demás. Destaco esto de haber tomado impulso para ir tras sus sueños, para ser alguien en la vida, para dejar huellas”.

Gorenstein, reconstruye las historias de Aixa Di Salvo, quién tuvo un accidente a los 12 años, quedó en silla de ruedas, pero logró cumplir el sueño que tenía desde niña y la de Lea Zajak quién perdió a toda su familia, sobrevivió a Auschwitz y encontró el verdadero sentido a su vida. La de Florencia Goyhman, a quien la detección de un cáncer le permitió redescubrirse y armar su propio emprendimiento. La de Verónica Nani, quien Sufrió la violencia de una madre alcohólica, pero logró perdonar y hoy disfruta del amor de sus hijos y la de Sandra Orellana quien con mucho sacrificio se recibió de maestra y hace 25 años que da clases en escuelas rurales.

También da voz a Silvina Alkerman quien luchó años para cumplir el deseo de ser madre; a NahirAmin a quien trasplantaron a los 11, cumplió el sueño de tocar el saxo y ganó medallas en el atletismo; a Viviana Minervini a quién le diagnosticaron cáncer de mamá, se deprimió, pero salió adelante por el amor de su familia; y a Agustina Molina, quien perdió a su marido y a uno de sus hijos, pero volvió a sonreír y a amar la vida.

Por otra parte, cuenta con el testimonio de Alejandra Jaraba a quien la pintura la salvó la vida en medio de una profunda depresión y la de Iliana Amestoy, quien padeció bullying, bulimia y no tuvo para comer, pero todas esas situaciones la transformaron en una mujer “invencible”. Y relata las historias de Daniela Aza, quien pese a su discapacidad descubrió que existen muchas formas de brillar, la de Berenice Bracco, a quien le mataron a su mamá y la violaron cuando tenía 13 años, pero está convencida que “no hay nada más lindo que construir desde el amor”, la de Ludmila Paez, “Una guerrera de la vida que lucha día a día para darle el mejor mundo posible a su hijo” y la de “Miriam Mac-namara: La adicción al paco la hizo abandonar a sus hijas, pero la vida le dio una segunda oportunidad”.

En primera persona

Además, la obra cuenta con aportes de distintas mujeres como “La capacidad de las mujeres para rearmarse y reconstruirse tras el dolor”, por Graciela Jinich; ¿Cómo desarrollar gratitud para aumentar la alegría en momentos difíciles? de Margarita Rodríguez Suárez, escrito especialmente para el e-book.

“Alguien”, una reflexión que Samanta Alvarez publicó en Facebook y retomó para el libro; “La sabiduría se forja también en la adversidad”, escrito especialmente por Tamara Rozanski y “A veces hasta que no nos rompemos, no sale lo mejor que tenemos”, de Analía Duo.

El volumen, que está editado de manera independiente y se puede conseguir en formato digital, tiene con prólogo de Valeria Schwalb y hay dos testimonios que se cuentan en primera persona: “La capacidad siempre es mayor a la discapacidad”, la historia de Nicole Aberg Cobo y “El humor como antídoto para atravesar una situación adversa: La experiencia con el cáncer contada en primera persona”, por Marcela Zarate.

“En vez de preguntarnos ¿por qué a mí? podemos cambiar el enfoque: ¿Por qué no a mí? o ¿Para qué a mí? A partir de ese momento podremos empezar a buscar el cómo, las diferentes herramientas o caminos que tendremos que encontrar para salir adelante”.

Un buscador de historias

– Hace tiempo que contás historias de resiliencia. ¿Cómo te vinculaste con el tema?
– Para finales del año 2010 propuse realizar en la revista Mía una sección de entrevistas a hombres y mujeres que habían superado situaciones adversas. Lamentablemente, esa sección duró poco tiempo, pero me hizo pensar en la posibilidad de seguir compartiendo diferentes historias de superación con los lectores. Y de esa forma salió publicado mi primer libro: Vidas que enseñan, que se compone de 25 relatos periodísticos de personas de todas las edades que superaron situaciones traumáticas. A partir de ese momento seguí escribiendo más libros y notas en los medios sobre esta temática.
Me defino como un buscador de historias, me encanta conocer personas comunes (que pueden estar en cualquier lugar de nuestras vidas) que tienen una historia muy interesante para contar y un legado muy importante para transmitir y contagiar esperanza a otra gente que, tal vez, se encuentra afrontando un difícil momento.

– En este e-book, contás casos específicamente de mujeres. ¿En la experiencia de escuchar los relatos, notás diferencias hay alguna particularidad entre hombres y mujeres a la hora de enfrentar la adversidad?
– Creo que las mujeres tienen una fortaleza innata que las caracteriza, pero a la vez son más sensibles y están más dispuestas a hablar de lo que les pasa. Las mujeres, muchas veces, son las que alzan la voz de mando a la hora de pedir justicia, las que se juntan entre pares para poder escucharse, entenderse e identificarse. Por lo general, son más emocionales, empáticas y extrovertidas.

– ¿Cómo te vinculás con las personas, con las historias y cómo encarás el trabajo previo a sentarte a escribir?
– Desde hace varios años que me dedico a este tipo de periodismo y en todo este tiempo he desarrollado la sensibilidad y la empatía para poder entrar al mundo de estas personas que confían en mí a la hora de contarme sus historias que, tal vez, en muchos de los casos nunca se animaron a compartirlas. Me gusta generar siempre un buen clima, de confianza para que la persona se sienta cómoda y relajada. Más allá, de que siempre está presente el grabador (para grabar la entrevista) no deja de ser una charla café de por medio.
Muchas veces me pasa que mientras estoy entrevistando a la persona ya voy imaginando la forma en que voy a plasmar la historia que no siempre es lineal. Otras veces, necesito desgrabar la entrevista por completo para analizar por dónde arranco.
En todos los casos, la idea es siempre la misma: contar el antes, el durante y el después de cada una de las historias con nombre y apellido. Siempre son casos reales donde el objetivo es poder plasmar cómo fue esa transformación, con qué herramientas contó el entrevistado, cómo cambió su vida, etc.

– ¿Hay alguna de las historias de este e-book que más te haya conmovido? ¿Cuál y por qué?
– El e-book se compone de 17 historias de mujeres de todas las edades que en algún momento de su vida tuvieron que afrontar alguna situación traumática y salieron adelante. Son 17 mujeres que no se conocen entre sí, cada historia es diferente a la otra. Seguramente, habrá personas que se identifiquen con algunas de ellas en particular.
Si tengo que elegir una, me inclino por la de Miriam Mac-Namara. Ella es una mujer que se metió en el mundo de la adicción al paco, se fue de su casa y abandonó a sus hijas. Sin embargo, la vida le dio una segunda oportunidad para recuperar todo lo que había perdido.

– ¿Cómo trabajaste con las protagonistas los capítulos escritos en primera persona?
– De las 17 historias, 2 fueron escritas en primera persona. En el caso de Nicole (que tiene parálisis cerebral y lupus) ella había escrito un libro contando su historia y me pareció interesante que pudiera hacer un resumen para mi e-book según algunas indicaciones que yo le propuse. Y luego hice la edición del texto que me mandó.
En el caso de Marcela, (que superó un cáncer) cuando me contaron su historia hicieron mucho hincapié en el humor que transmitía en medio del tratamiento. Por eso le pedí que me escribiera anécdotas sobre esos tiempos y la verdad que quedó muy natural la manera en que está plasmado.

Identificación

– ¿Creés que la diversidad de las historias genera identificación con los lectores?
– Totalmente, esa es un poco la idea. Hay mujeres que podrán identificarse con alguna de las protagonistas que superó una enfermedad, otras con aquella que salió adelante tras sufrir bullying, con quien superó la muerte de un hijo, entre otras adversidades.

– ¿Por la cantidad de testimonios que has escuchado, cuánto de fortaleza, actitud individual y cuánto de apoyo del entorno, de una figura externa es importante para sobreponerse a la adversidad?
– Creo que es un poco de todo eso. Lo más importante es hacerse cargo de lo que nos pasa. Afrontarlo. No evadirlo. No colocarnos en el lugar de víctimas, sino todo lo contrario. En vez de preguntarnos ¿por qué a mí? podemos cambiar el enfoque: ¿Por qué no a mí? o ¿Para qué a mí? A partir de ese momento podremos empezar a buscar el cómo, las diferentes herramientas o caminos que tendremos que encontrar para salir adelante.
Muchas personas me cuentan que ellos mismos no eran conscientes de la fortaleza que tenían hasta que la situación traumática ameritó que se encendieran esos mecanismos resilientes con los que todos contamos.
Además de la actitud y de la aptitud, es importante contar con un entorno que nos brinde una mano, que nos escuche, que nos entienda, que no nos juzgue y que nos contenga en esos momentos de dolor.
También son importantes los grupos de pares porque la persona se da cuenta que no es la única que está atravesando esa situación. El hecho de estar entre pares permite sentirse identificado y esa identificación genera sentimientos de esperanza y pensamientos positivos.

– ¿Qué le suma al trabajo, a la mecánica del proceso de reconstrucción de las historias tu oficio/profesión de periodista? y ¿cuáles son los puntos que en este trabajo de escribir te cuestan más?
– Primero que nada soy periodista (jaja) y en los últimos años me transformé en escritor. Por lo tanto, en cada una de las historias siempre está explícito mi oficio de periodista: mi inquietud a la hora de buscar y elegir las historias, la forma de encarar las preguntas, de vincularme con el protagonista.

– A diferencia de tus primeros libros, más periodísticos, los siguientes tuvieron un trabajo más literario, como este…
– Este es más literario, ficcionalizado, siempre respetando la veracidad de cada una de las historias. La idea es que los lectores sientan que se encuentran en el mismo lugar de los hechos.

– Decidiste publicarlo en versión digital. ¿Es una edición independiente? ¿Por qué plataformas se puede acceder a él?
– La gente que quiera adquirir el e-book me puede contactar por mail ([email protected]) o a través de mis redes sociales.

Facebook: Alejandro Gorenstein
Instagram: @alegorenstein