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La Ciudad 9 de noviembre de 2018

La ESI y un proyecto de extensión de la Universidad Nacional de Mar del Plata

"De la escuela a la radio y de la radio a la comunidad" es el nombre del espacio de la Facultad de Salud y Trabajo Social que busca reflexionar sobre las problemáticas vinculadas a la educación sexual integral.

Con la Ley de Educación Sexual Integral (más conocida como ESI) en boca de todos a raíz de las reformas que se buscan impulsar desde el Congreso de la Nación, surge en la Universidad de Mar del Plata un proyecto que lleva a las aulas materiales de difusión sobre la temática.

“Que se escuche la ESI. De la escuela a la radio y de la radio a la comunidad” es el nombre de la iniciativa que se enmarca en el Programa de Género y Acción Comunitaria de la Secretaría de Extensión de la Facultad de Ciencias de la Salud y Trabajo Social, y que, desde hace algunos meses, pretende promover la ESI a través de talleres de reflexión bajo la metología de la Educación Popular de Paulo Freire.

“Se busca construir una ‘caja de herramientas’ con materiales auditivos y visuales de difusión de la ESI -como spots radiales, folletos, afiches, en formato papel y digital- para lo que se está capacitando además en comunicación y transmisión de contenido”, señalaron a LA CAPITAL integrantes del proyecto.

Según señalaron, “la ‘caja de herramientas’ será el resultado de la construcción de saberes donde la juventud es protagonista, contribuyendo a difundir el derecho a la educación sexual integral en diversos ámbitos”.
“Creemos que el saber se construye a partir del encuentro con el otre (sic), diverso, diferente. Se trata de abrir preguntas, desnaturalizando y problematizando nuestra cotidianeidad y lo establecido”, agregaron, en referencia al trabajo que realizan con los alumnos.

El recibimiento en las escuelas

Consultadas por el recibimiento que obtenían en los establecimientos educativos a donde llevaban la propuesta, aseguraron que siempre es “muy buena”.

Por ejemplo, indicaron: “En la Escuela Secundaria N°30, auxiliares, docentes y directives nos reciben con muy buena predisposición, lo que facilita mucho el trabajo con les jóvenes, prestándonos, en más de una ocasión, sus horas de clase para que los talleres que se realizan cada 15 días se puedan desarrollar”.

En este sentido, aseguraron que los estudiantes se involucran “activamente” a los tiempos de debates, donde re-piensan situaciones de la vida contidiana, plantean sus inquietudes y opinan acerca de temas de actualidad.

“Los temas tratados hasta el momento han sido: violencia institucional, violencia de género, estereotipos de género, diversidad sexual, embarazo y decisión, derechos del niñe y adolescente, derechos sexuales y (no) reproductivos, anticoncepción y próximamente realizaremos talleres sobre medios de comunicación, de cara a la realización de la ‘caja de herramientas'”, explicaron.

¿Qué ocurre con la ESI?

El reclamo por la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral N° 26.150 surgió con fuerza durante el debate por la legalización del aborto en Argentina, dado que tanto quienes se manifestaban a favor de la IVE (interrupción voluntaria del embarazo) como aquellos que mantenían una postura contraria, levantaron la bandera de la importancia de abordar estos conocimientos en las aulas.

Sin embargo, pese a que la ley se encuentra sancionada y promulgada desde octubre de 2006, dicha ley fue adherida solo por 9 de las 24 provincias, lo que llevó a muchos dirigentes, educadores y especialistas a impulsar una reforma de la normativa.

En este sentido, y con el objetivos de transformar de “orden público” la normativa, para así lograr que su aplicación sea obligatoria en todo el territorio nacional.

Uno de los cambios que más polémica trajo es el de eliminar la posibilidad de que los establecimientos educativos adapten la ESI a su “ideario institucional y a las convicciones de sus miembros”, punto que quienes impulsan la modificación sostienen que ha permitido la obstaculización de la enseñanza de educación sexual en escuelas religiosas.

El 4 de septiembre pasado, se logró dictamen de mayoría para reformar la ley de Educación Sexual Integral (ESI), en reunión plenaria de comisiones de Educación y de Mujer, Niñez y Familia.

Ante su posible tratamiento en la Cámara de Diputados, el panorama que se vive en torno a la temática es similar a la vivida durante el debate por la legalización del aborto, ya que existen dos claras posturas.

De hecho, a fines de octubre se llevaron a cabo multitudinarias marchas en contra de la aplicación de las modificaciones de la ley bajo el lema “Con mis hijos no te metas”.

Vale destacar que el Programa Nacional de Salud Sexual Integral persigue como objetivos: incorporar la educación sexual integral dentro de las propuestas educativas orientadas a la formación armónica, equilibrada y permanente de las personas; asegurar la transmisión de conocimientos pertinentes, precisos, confiables y actualizados sobre los distintos aspectos involucrados en la educación sexual integral; promover actitudes responsables ante la sexualidad; prevenir los problemas relacionados con la salud en general y la salud sexual y reproductiva en particular y, por último, procurar igualdad de trato y oportunidades para todas las personas.



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