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Deportes 25 de noviembre de 2021

La eternidad del “Diez”

Al cumplirse un año de la muerte de Diego, el mundo le tributó un sinfín de homenajes. Villa Fiorito, La Paternal y Nápoles fueron epicentro de los actos más emotivos.

Diego Armando Maradona, el “Diez”, será de los poquísimos seres humanos que trascenderá su propia existencia y alcanzará la eternidad, amado por quienes no lo vieron jugar, por quienes ni lo conocieron ni lo conocerán, porque esto es lo que recogieron todos y cada uno de los homenajes que le prodigaron por estos días hasta este jueves, en que se cumplió un año de su muerte, o quizá mejor dicho, el comienzo de su segundo tiempo.

Y la muestra más palpable de esto último se reveló por la tarde con la celebración de una misa frente a su casa natal de Villa Fiorito, como si se tratara de un segundo bautismo, de un renacimiento.

Para llegar a ella se realizó una marcha que empezó en la estación de trenes de Villa Fiorito (la i y la o juntas formaron un 10 en celeste y blanco) organizada por Armando Fleita, quien conduce el centro cultural “La Casa de Fiorito” y es propietario de la comunal Radio Maradó.

misamaradona

“Nosotros organizamos esta marcha de antorchas desde la estación Fiorito pasando por el club Estrella, que es donde surgió Diego, para después celebrar esta misa que ya la íbamos a realizar el año pasado, pero queríamos que la celebrara el cura de aquí, Paco Olveira, y no pudo ser. Por suerte este año si puede estar y por eso llevamos todo esto adelante”, dijo Fleita.

A la misa asistió Lidia “Taty” Almeida, referente de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, y el padre Olveira, que ofició la misa, ofreció previamente quizá la frase más significativa y emblemática de ese mencionado paso de Diego a la eternidad en el día del primer aniversario de su deceso: “La Mano de Dios está hoy en las manos de Dios”.

“Porque Diego es de Villa Fiorito y nunca se fue del barrio, por más que haya estado por todo el mundo y haya sido una figura mundial dentro del fútbol pero también fuera de él”, remarcó el cura párroco del pago natal del mejor futbolista de la historia.

La estación Villa Fiorito donde Diego tomó el tren para viajar rumbo a La Paternal para jugar en la primera división de Argentinos Juniors se convirtió también en un lugar de culto para todos los devotos maradonianos.

diegoantorchas

Claro que los actos de amor hacia Diego en este día en particular, y en los previos en general, pasaron por todos los estadíos y ámbitos dentro y fuera del fútbol, como dijo el padre Olveira, pasando por Lionel Messi, siguiendo por el presidente de FIFA, Gianni Infantino, y por referentes de distintos ámbitos sociales en el mundo entero.

Pero a esas muestras realizadas a la vista de todo el mundo por estas horas se hicieron luz también muchas otras que hablan de una fidelidad y una devoción por Maradona que excede este tiempo y hasta su familia, como por ejemplo los nombres que refieren a Diego y que pone quien fuera su compañero y amigo, Héctor Enrique, en cada uno de sus emprendimientos.

O el bautizado Napoli Argentino, un novel club de fútbol de Berazategui con sede en Ranelagh que con su nombre quiso resignificar el amor que sus fundadores profesan por Maradona, y que ahora desde la Liga de Chascomús quieren dar el salto al Regional Federal Amateur soñando con, algún día, con subirse al carrousel del Federal A.

Otros actos celebrados en La Paternal de sus comienzos como futbolista en Argentinos Juniors, y en La Plata, donde terminó su carrera como entrenador en Gimnasia y Esgrima, también enmarcaron una jornada que desde el martes tuvo el pregón de cada estadio de primera división que le fue volcando su homenaje con los jugadores alineados formando con sus cuerpos el 1 y el 0 del único “Diez”.

FBL-ITA-MARADONA-ANNIVERSARY

En Nápoles se realizó una marcha multitudinaria y se descubrió una estatua en el ingreso al estadio donde Diego brillara en la década del 80.

Es que como él dentro de la cancha, cada expresión por su nombre y no en su nombre, tiene la intención de la creatividad, de lo artístico, y por lo tanto de lo inevitablemente emotivo.

Es que Diego unió a todos, la historia repetida de cada reconocimiento, de cada aplauso, de cada recurrente cántico para “el que no salta, es un inglés”, fue consecuencia de una sola causa: tratar de comprender por qué Maradona se fue, por qué ya no está con su impronta parecida a ninguna otra.

Y entonces volverá esa sensación del principio. Que si Diego todo lo pudo en vida, entonces como no va a poder ahora, si es eterno.