El sepulturero Juan Carlos López fue liberado este martes a la mañana luego de haber sido detenido hace cinco días en el marco de la investigación del caso de la profanación de una tumba de un nene de 2 años en el cementerio de Comandante Nicanor Otamendi.

El domingo pasado, más de 500 vecinos de esa localidad marcharon para reclamar la liberación de López ya que lo consideraban “un perejil” que no tenía relación con la desaparición del cuerpo del menor, que fue hallado por un vagabundo  al borde un arroyo entre Miramar y Mar del Sud.

López había sido detenido porque, según los investigadores, la responsabilidad de que no se profanara el cadáver era del cementerio. Además se lo imputaba de falso testimonio.

Este martes, el sepulturero recuperó la libertad, se reencontró con su familia y la imagen comenzó a circular por las redes sociales con mensajes de apoyo.

El sepulturero al reencontrase con su familia.