Por Marcelo Solari

 
A Peñarol se le complicó el futuro. La inapelable derrota como local ante Zárate Básket, este domingo por 78 a 64, lo alejó de sus aspiraciones de acceder a los play-offs de la Liga Nacional de Básquetbol 2023/24.

Dato insoslayable: la escasa dotación de personal disponible claramente le jugó en contra. Pero el plan de juego de la visita funcionó a la perfección. Su premisa defensiva se enfocó en aislar a Al Thornton y no varió cuando cambiaron los apellidos en cancha, más allá de que Enzo Rupcic fue quien más tiempo se ocupó del estadounidense con pasado NBA.

El juego casi no pasó por Thornton, y entonces Peñarol tuvo que buscar otros caminos. Casi siempre forzando situaciones.

La respuesta de Zárate fue más natural. Castigó con tres triples casi calcados, de frente al canasto con el tirador liberado por la cortina.

Peñarol se focalizó en minimizar la inicidencia del goleador de la Liga, Agustín Brocal. Lo consiguió en el primer cuarto, aunque no pudo evitar que se abrieron otras opciones confiables.

Por momentos, el “milrayitas” dio algunas señales de acomodar algunas cuestiones defensivas, aún con el susto por la torcedura de tobillo de Francisco Filippa, que de todos modos no le impediría continuar en el juego.

Los primeros puntos de Thornton llegaron recién a la mitad del segundo cuarto (dos tiros libres), y a esa altura, Joaquín Valinotti, Tomás Monacchi y Víctor Fernández tiraban del carro en ataque (24-29) para mantenerse al acecho.

Más allá de cargar al rebote ofensivo con decisión, a Peñarol le costó transformar en puntos segundas y hasta terceras opciones de disparo. Y el desenlace del segundo cuarto fue una pesadilla para el local. Multiplicó sus pérdidas (11 en todo el primer tiempo contra sólo 2 de su adversario), no enderezó la puntería exterior (4/24 en triples) y del otro lado estuvo un equipo que capitalizó casi todo (en transición veloz y en el ataque fijo), conducido por un implacable Lucas Andújar, tanto adelante (9 puntos y 9 asistencias en los primeros 20 minutos) como atrás (3 robos). El panorama asomaba sombrío para los de Hernán Laginestra y se ratificó con el 31-47 parcial.

Había que remar de atrás ¡y cómo! La buena noticia era que todavía quedaban 20 minutos por delante. Zárate aguantó los primeros embates en el tercer cuarto. Peñarol necesitaba acortar, sí, pero se apresuró y le faltó calma. Ese aplomo que exhibía Zárate Básquet, amparado en una ventaja que supo administrar con autoridad.

A falta de 3 minutos y con esfuerzo, logró aproximarse a 41-50. Pero tras el “minuto” de Juan Manuel Anglese, Zárate acertó tres triples seguidos (Andújar, Damián Pineda y Brocal) y recuperó casi toda la ventaja.

El equipo marplatense no tenía otro camino que jugarse todo en el segmento final. Remó como pudo y cuanto pudo hasta situarse 60-67 a 5m30s. Un rato antes parecía estar lejos y ahora se encendía una luz de esperanza. Enseguida, Pineda aplicó una bofetada de tres puntos y la reacción se aplacó. No era la noche. Zárate fue el mejor de los dos y se llevó una victoria más que merecida. Con Andújar como máxima figura y un equipo que mostró virtudes como para estar más arriba en la tabla.

La síntesis

Peñarol 64
J. Valinotti 21, T. Monacchi 10, J. Morales 0, A. Thornton 11 y F. Filippa 8 (FI). O. Sarmiento 0, V. Fernández 11, F. Tolosa 3. DT: Hernán Laginestra

Zárate Básket 78
L. Andújar 14, A. Brocal 18, C. Gómez Quinteros 6, E. Rupcic 19 y S. Chaine 5 (FI). F. Pascolatt 0, D. Pineda 8, J. Aprea 3, E.H. Merchant 5, S. Polese 0. DT: Juan Manuel Anglese.

Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Árbitros: Oscar Britez, Pedro Hoyo y Maximiliano Cáceres.
Parciales: 13-20, 31-47 y 48-62.