BALCARCE (Corresponsal).- Una vecina le contó a la concejal Mónica Llarena (PJ-Cumplir) que tardó ocho horas para llenar un balde ante la reducción del suministro por falta de pago y ese fue el detonante para que presentara un proyecto para conocer “qué criterio aplica Aguas de Balcarce para la suspensión del servicio a través de la reducción del suministro de agua”.

La inquietud tuvo su correlato durante la última sesión ordinaria donde se aprobó por unanimidad hacer ésta y otras consultas a Aguas de Balcarce SA. Asimismo, se decidió convocar a la gerente de la empresa concesionaria del servicio de agua y cloacas, Yamile Pusineri, para que brinde explicaciones sobre la cantidad de viviendas en las que ha efectuado la reducción del suministro, qué deudas poseen, desde que fecha existe la deuda, planes de pago caídos e intimaciones efectuadas.

“Hace un tiempo que venimos teniendo quejas de los vecinos que tienen deudas porque les están pidiendo entre 10 y 15.000 pesos para adherir a un plan de pagos. De hecho algunos han tenido que tomar un crédito para poder hacerlo”, le contó Llarena a LA CAPITAL.

La edil reconoció que existe la posibilidad de que la empresa haga la reducción del suministro ante la falta de pago pero dijo que había estimaciones que no era “tan extremo”. Ejemplificó diciendo que entendían que era para casos de tratar de llenar un lavarropas automáticos o tratar de hacer andar un calefón eléctrico. “En la actualidad hay gente que nos dice que ha tardado ocho horas en llenar un balde”, apuntó.

Llarena se preguntó “hasta dónde le puede cerrar el grifo para que la gente se quede prácticamente sin agua. Nos preguntamos quién tiene que controlar ese tipo de medidas, cuál es el órgano de contralor. Si bien sabemos que hay un ámbito de concesiones en la Municipalidad”.

En tanto, indicó que “esta empresa desde que ha llegado parece que está comercializando lingotes de oro y no un servicio esencial como es el agua”.-