Por Sebastián Arana

Una lógica victoria por 98-76 se llevó de Mar del Plata Deportivo Viedma sobre Quilmes en el inicio de la segunda fase de la Liga Argentina de Básquetbol. Los rionegrinos ratificaron pretensiones, pergaminos de la fase anterior y liderazgo en la tabla. Y los de Manu Gelpi, con sus sabidas limitaciones de personal, hicieron lo que pudieron. O, mejor dicho, lo que pudieron Alex Negrete y Lucio Castellani.

Dos buenas cartas, sin embargo, no alcanzan para ganar. No a un equipo tan bien balanceado como el de Guillermo Bogliacino. Los mencionados jugadores se hicieron cargo de la situación y acapararon gran parte de una ofensiva que tuvo números dignos.

Quilmes, sin embargo, tuvo dos problemas. Negrete y Castellani estuvieron demasiado solos. Apenas Gago, con algunos chispazos de su calidad, les arrimó algo de apoyo. No cabía esperar demasiado de los chicos y de Catelotti, quienes están para sumar los puntos. Sí de Agustín Jara, pero el chaqueño tuvo una noche negra.

El otro inconveniente, el de mayor incidencia en el juego, fue que el equipo local no pudo plantar defensa, salvo en esporádicos pasajes. Esa inconsistencia tornaba estériles los esfuerzos de Castellani y Negrete del otro lado de la cancha.

Deportivo Viedma, después de arrancar 0-7, respondió con un tremendo primer cuarto de un ex “tricolor” como Raúl Pelorosso, autor de once puntos en el parcial y de un triple sobre la chicharra que llamaba al descanso corto que estiró la ventaja a 25-18 para los rionegrinos.

El dúo dinámico Negrete-Castellani mantuvo el tono en un segundo parcial en el que Deportivo Viedma cuidó la máquina y manejó la diferencia con el superior aporte de su rotación. Y un triple de Fagotti segundos antes del entretiempo estiró la luz a 45-36.

Los buenos porcentajes del tiro exterior rionegrino (50% de tres puntos en la primera parte) decayeron en el tercer cuarto. Y Quilmes, aun sufriendo el poderío interior de Maximiliano Tabieres, logró situarse a un solo doble (57-59) en la segunda mitad de ese parcial. Con Negrete decididamente intratable. Pero hasta ahí llegó el embate local.

En el último segmento, Castellani acusó el esfuerzo, Negrete fue mejor marcado y se derrumbaron las últimas esperanzas de reacción. Para colmo, Deportivo Viedma recuperó su poder de fuego exterior. Matías Eidintas, gran figura, además de anotar a placer, hizo jugar a todos. Y los rionegrinos se terminaron floreando.

Síntesis

Quilmes (76): F. Gago 9, D. Skidelsky 2, A. Negrete 29, L. Castellani 19 y T. Nally 2 (FI); A. Jara 3, L. Catelotti 1, F. Arraiz 5, A. Ecker 0 y T. Ghietti 6. DT: Manuel Gelpi.

Deportivo Viedma (98): R. Pelorosso 16, M. Eidintas 24, J. C. Marini 0, T. Young 8 y M. Tabieres 19 (FI); M. Fagotti 10, L. Capponi 9, M. Marina 12, R. Méndez 0, F. Michelli 0 y S. Locher 0. DT: Guillermo Bogliacino.

Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Àrbitros: Fabio Alaniz-Guillermo Grondona-Marjorie Stuardo.
Parciales: 18-25, 36-45 y 58-63.