Un listado de socios de Rancho Móvil difícil de leer y con tachaduras. Eso fue lo que dejó en el Concejo Deliberante la presidenta del Ente Municipal de Turismo (Emtur), Gabriela Magnoler, la semana pasada cuando expuso en la comisión de Turismo por la construcción de cabañas ilegales.

La concejal de Acción Marplatense Claudia Rodríguez le había solicitado una lista de los propietarios de esas construcciones fuera de toda regla (lo único que se podía instalar en ese predio del kilómetro 28 de la ruta provincial 11 administrado por la asociación Rancho Móvil eran casillas rodantes).

Magnoler y su equipo respondieron que no la tenían. Que cuando les preguntaron a las autoridades de la asociación Rancho Móvil de quiénes eran esas cabañas les contestaron que pertenecían “a sus socios”. Y que se limitaron a entregarles esa lista que incluye, sin distinción alguna, a inocentes y pecadores.

No conforme con ese listado que confunde más de lo que aclara, el presidente de la comisión, Marcos Gutiérrez (Unidad Ciudadana), presentó un proyecto de comunicación para que el Ejecutivo informe la nómina de personas que realizaron construcciones no autorizadas dentro de la Unidad Turística Fiscal (UTF) Playa Redonda.

El concejal recordó que a la exposición de Magnoler asistieron socios de Rancho Móvil que remarcaron que no todos participaban de las acciones que derivaron en la caducidad del permiso.

El pedido de Gutiérrez no fue la única repercusión de aquella reunión. Este lunes, el Tribunal de Cuentas de la provincia solicitó una copia certificada del acta de ese encuentro en el que Magnoler no explicó por qué entre septiembre y enero se construyeron 15 cabañas o “ranchitos” ilegales.

Magnoler dijo que el Emtur hizo todas las actuaciones administrativas correspondientes. Esa prolijidad, acotó, permitió que la medida cautelar solicitada por la asociación fuera rechazada en la Justicia. El concejal radical Mario Rodríguez discrepó: dijo que la medida cautelar fue rechazada porque la ilegalidad de las construcciones era más que evidente.

La Asociación Rancho Móvil de la Costa tenía el permiso precario de uso y explotación de la unidad turística desde 2003. Por las irregularidades, el 24 de enero el intendente dispuso la caducidad de ese permiso y la desocupación del lugar.