MIRAMAR (Corresponsal).- Cuando la vida los cruzó, Luis Alberto Spinetta y Rodolfo García tenían 13 y 17 años, respectivamente desde ese instante la música los unió en una misma sintonía, esa que luego los llevó a conformar Almendra en 1967, esa gran banda que si bien perduró sólo dos años dejó un sello imborrable en la historia del rock nacional.

“Era una persona de mucha sabiduría y se interesaba mucho en las letras de las canciones, donde le ponía un tinte poético”, sostuvo García.

El baterista fue invitado por las autoridades del Instituto Saint Exupery para precisamente dejar testimonio sobre el fenómeno cultural argentino que es Spinetta, en el marco de la inauguración del salón de usos múltiples de la institución educativa que desde hace pocos días lleva su nombre.

“En una charla que mantuvimos me pidió ir a un ensayo de la primera banda que integraba. Luego las conversaciones continuaron y la relación creció, pero desde el encuentro inicial me di cuenta que había hablado con un tipo que quizá hasta ese momento no estaba ligado a la música pero tenía un amplio y minuciosos conocimiento, junto con un poder de interpretación extraordinario”, dijo García.

“Sin dudas el Flaco Spinetta fue un genio de la música y permanece como una figura rutilante de la cultura argentina”, aseveró sin dudas el músico.

La carrera de la banda fue corta pero exitosa y cuando llegó el momento de la separación, el propio Spinetta dijo “Almendra no se divide, se multiplica”. “Ya no estábamos motivados para tocar juntos”, fue otra de las frases del creador de ‘Muchacha ojos de papel’, en su momento, desterrando algunas versiones que indicaban problemas de dinero entre los integrantes.

“La gente descree que hayamos tenido una carrera tan corta juntos, pero fue así, aunque hubo mucha intensidad en ese período con grabaciones y recitales”, destacó quien también formara parte de Aquelarre, Tantor, además de ser director Nacional de Artes y organizador de numerosos eventos de alcance internacional en el área cultural.