MIRAMAR (Corresponsal).- Una fuerte granizada sacudió la mañana de este domingo la tranquilidad de la localidad rural  de Mechongué.

Si bien existía pronóstico de tormenta y abundante caída de lluvia, la conjunción de factores climáticos con choque de corrientes de distinta temperatura provocaron que el cielo se oscureciera repentinamente alrededor de las 9.30 y comenzaran a caer piedras de gran tamaño, fenómeno que se extendió por alrededor de media hora.

Esta situación causó ciertos daños en algunos domicilios, sobre todo persianas que resultaron agujereadas y techos de chapa.

Cabe señalar que en la zona suelen producirse este tipo de fenómenos naturales sin que otras localidades cercanas vivan algo similar. Por ejemplo, el 26 de julio de 2014 el pequeño pueblo rural del Partido de General Alvarado amaneció cubierto de nieve, panorama que no se divisó en Miramar, Otamendi, ni Mar del Sud.