Durante el primer semestre del 2021, la tasa de empleo en Mar del Plata fue 0,6% más baja que el año pasado, pero al mismo tiempo se advierte una particularidad no muchas veces vista en el mercado laboral: hay menos personas ocupadas y también menos desocupados, lo que un nuevo informe sociolaboral elaborado por la UNMdP explica como una caída en el número de marplatenses que participa activamente en el mercado de trabajo, es decir, que “no tiene” pero “tampoco busca” empleo.

En una nueva edición del Informe Sociolaboral del Partido de General Pueyrredon, el Grupo de Estudios del Trabajo analizó el impacto de las políticas económicas sobre el mercado laboral hasta el primer trimestre de 2021.

En el plano macroeconómico se advierten algunos indicios de recuperación luego de “tres años de recesión”, proceso que se vio profundizo en 2020 por la irrupción de la pandemia. En los primeros meses de 2021 “se registran indicadores positivos” en los frentes externo y cambiario, así como una reducción del déficit fiscal. No obstante, “persisten niveles elevados de inflación”, que se aceleró en relación a lo sucedido el año pasado.

Así, si bien en el primer trimestre de 2021 el mercado de trabajo presenta un deterioro interanual, el mismo resulta menor que el que se venía sucediendo a partir del establecimiento del ASPO. Es decir que en los primeros tres meses del año se afianzó una “desaceleración del impacto negativo del ASPO” sobre la economía y el mundo del trabajo.

A nivel nacional, cayó el empleo (al 41,6%), la desocupación (10,2%) y aumentó la subocupación (11,9%). Asimismo, los efectos no sólo se dieron en la cantidad sino también en la calidad, dado que se produjo una destrucción de trabajo registrado (-124.219 trabajadores).

En Mar del Plata se presentó una reducción de la cantidad de ocupados (-4.000) y desocupados (-4.000), es decir, hay 8000 personas menos dentro de la Población Económicamente Activa (PEA). La lógica indicaría que si un trabajador no está ocupado, se encuentra desocupado. Pero en este caso la respuesta no es tan lineal, sino más compleja.

Según explicaron a LA CAPITAL los realizadores de este informe, hay una caída en la cantidad de personas que participa activamente en el mercado de trabajo. Más concretamente, un aumento en la cantidad de gente que no tiene pero tampoco busca empleo.

Este fenómeno, estiman, se da por razones subjetivas que escapan a la medición científica: la falta de oportunidades de empleo, y la idea “instalada” de “no vale la pena buscar porque no hay”, pero al mismo tiempo el incremento del trabajo por cuenta propia.

En Mar del Plata esto impacta en una caída de la tasa de actividad (se ubicó en el 47,5%), en la tasa de empleo (43,1%) y en la tasa de desocupación (9,4%). Asimismo, disminuye la subocupación (12,3%) y la presión general en el mercado de trabajo (23,2%) ubicándose en mínimos históricos. Todo ello da cuenta de “la persistencia de desaliento en la búsqueda de empleo”, apunta el Informe Sociolaboral.

De acuerdo a los datos para el total del país del primer trimestre de 2021 elaborados a partir de la información mensual del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), la cantidad total de trabajadores registrados cayó en 124.219 personas respecto a igual trimestre de 2020, lo que representa una caída interanual del 1%.

Esto evidencia que “la destrucción neta” de trabajo registrado continúa desacelerándose, luego del fuerte impacto que tuvo el ASPO en marzo de 2020. Cabe recordar que durante el segundo trimestre de ese año la disminución había sido de -2,6%, en el tercer trimestre de -2,3% y en el cuarto del -1,8%.

La evolución de los últimos años muestra que el máximo histórico del total de trabajadores registrados se alcanzó en diciembre de 2017, pero se encuentra explicado principalmente por el aumento de la cantidad de monotributistas y asalariadas de casas particulares.

Luego, indica el informe, en septiembre de 2018 comenzó “una destrucción de puestos de trabajo” que se fue acelerando hasta mediados de 2019 para luego desacelerar hasta febrero de 2020.

Desde el inicio de la pandemia, la caída del número de trabajadores registrados se incrementó considerablemente hasta mayo de 2020 y a partir del mes siguiente comenzó una desaceleración que continúa hasta marzo de 2021. En este sentido, son 31 meses consecutivos con variaciones negativas.

La mayor variación negativa se dio en los asalariados privados, con una disminución de 143.177 trabajadores (-2,8%). Asimismo, se redujo el número empleadas de casas particulares (-26.303) y de trabajadores autónomos (-17.780), dos grupos que han sido particularmente afectados desde el inicio de la pandemia.

En cambio, se incrementó levemente la cantidad de monotributistas sociales (+534) y moderadamente la de asalariados públicos (+33.770) y monotributistas (+28.837). En términos generales, en Mar del Plata se presenta una reducción de la cantidad de ocupados y desocupados, por ende, cae la Población Económicamente Activa.

Asimismo, disminuye la subocupación y la presión general en el mercado de trabajo, lo que da cuenta de la persistencia de desaliento en la búsqueda de empleo. En el total país, está dinámica se dio de manera similar aunque con variaciones de menor proporción.

La tasa de actividad mide el porcentaje que representa la Población Económicamente Activa (PEA) -ocupados más desocupados- en relación a la población total y constituye una variable central para dar cuenta del dinamismo del mercado de trabajo.

La caída de la tasa de empleo continúa desacelerándose respecto al fuerte impacto negativo que había sucedido desde el establecimiento del ASPO. “Podríamos afirmar que el nivel de empleo se viene recuperando trimestre a trimestre. No obstante, aún se encuentra por debajo del nivel alcanzado en el período prepandemia, que no sólo ya se venía reduciendo sino que también tenía un alto componente de informalidad laboral”, analiza el estudio.

También, en el primer trimestre de 2021 la tasa de desocupación presentó descensos en el plano nacional y local. En todo el país fue leve, dado que pasó del 10,4% al 10,2%, valor que representa 1.355.000 personas desocupadas. En Mar del Plata cayó 1 punto porcentual, llegando al 9,4%, con 29.000 personas en esa situación.

En este sentido, la tasa de desocupación del 9,4% en Mar del Plata es el resultado del menor número de desocupados, que fue proporcionalmente superior al efecto de la disminución de la PEA.

“De no haberse producido esta disminución en el empleo, la tasa de desocupación hubiera sido del 10,7% y estaríamos en el sexto lugar del ranking de aglomerados. Por ende, esto implica que hay una proporción de desempleo oculto en la inactividad que, de incluirse en el cálculo de la tasa de desocupación, elevaría ese guarismo en 1,3 puntos porcentuales más”, agrega el informe.

Frente a este contexto, plantearon los investigadores, “se requiere una fuerte presencia del Estado” con medidas que favorezcan la creación de puestos de trabajo formales, acompañadas de políticas de cuidado junto con un fuerte apoyo a todos los sectores productivos afectados. Sin estas condiciones, advirtieron, resulta “poco probable” que el conjunto de la población alcance un nivel de vida digno.

Novena en el ranking de subocupación

Un indicador indirecto respecto a la calidad de la ocupación es la tasa de subocupación, que representa la cantidad de ocupados (que trabajan menos de 35 horas semanales por causas involuntarias) como proporción de la población económicamente activa.

A nivel nacional, este indicador se mantuvo relativamente estable, dado que pasó del 11,7% al 11,9%. No obstante, el valor resulta “elevado”, dado que representa el más alto para un primer trimestre desde el año 2005.

Subocupados. Al menos 38.000 marplatenses trabajan menos de 35 horas por semana por causas involuntarias.

A nivel local, en tanto, cayó significativamente del 16,1% al 12,3% (38.000 personas). Con ese valor, Mar del Plata se ubica en el noveno lugar del ranking nacional, encabezado por Gran Córdoba (18,6%) y Gran Mendoza (17,4%).

Por otra parte, en nuestra ciudad la proporción de ocupados que demanda otro empleo también bajó, pasando del 17,7% al 13,8% (valor que involucra a 42.000 personas) un valor “muy bajo” para Mar del Plata, que representa un mínimo histórico para un primer trimestre, apuntaron los realizadores del informe.

Como ha venido sucediendo desde comienzos de 2019, esta disminución está explicada también por “un efecto desaliento en la búsqueda de empleo de la población ocupada”, concluye el informe.