Siempre se dice que el superclásico marplatense de la Liga Nacional de Básquetbol es una fiesta. Hoy más que nunca. Peñarol y Quilmes, cara a cara por última vez en la temporada, jugarán con la misma pasión que ponen cada vez que se enfrentan.

Pero la cita está enriquecida por otros ingredientes. Esta vez no tienen que ver con lo deportivo. En rigor de verdad, juegan por cumplir con el fixture. Peñarol ya no puede ingresar a play-offs y también terminó de sufrir con la posibilidad de jugar el play-offs del décimo puesto. Por otro lado, el triunfo de San Lorenzo sobre Obras del último jueves decantó la notable clasificación de Quilmes a la post temporada. El equipo de Javier Bianchelli, sexto, no puede mejorar posición y, ocurra lo que ocurra, enfrentará a Bahía Basket en el play-offs.

Lo que hace de este partido una cita imperdible es que será el clásico de las despedidas. La ocasión que Leonardo Gutiérrez, máximo referente de lo mejor de la historia de Peñarol, eligió para ponerle punto final a su extraordinaria carrera de veintitrés temporadas como profesional, jalonada por veintidós títulos con clubes (diez de ellos de Liga Nacional, récord absoluto) y otros cinco con la Selección Argentina, con la medalla de campeón olímpico en Atenas 2004 como orgullo máximo. Y la última vez que Luca Vildoza, acaso la máxima joya de la cantera quilmeña, se ponga la “tricolor” ante el rival de toda la vida antes de continuar su carrera en el Baskonia de la poderosa liga española.

Por eso lo de, más que nunca, fiesta para disfrutar. Porque, a la par de la posibilidad de festejar un triunfo, a cada hincha le importará registrar todo lo que pueda de la última función de Leo o del último clásico de Luca. Y llevarse de esa noche el mejor de los recuerdos de sus ídolos.

En cuanto a lo estrictamente deportivo, Peñarol no podrá contar con Alejandro Diez, desgarrado frente a Libertad y con inminente paso por el quirófano para intervenirse de su lesión en la cadera. Richotti, sin él, evalúa entre disponer un equipo alto o ingresar con Dabney para equilibrar la velocidad de la media cancha quilmeña.

Quilmes, pese a su clasificación asegurada y su sexto puesto inamovible, irá por el triunfo que le permita coronar una temporada ganadora sobre Peñarol, algo que no ocurre desde la temporada 2003/2004.

Formaciones

Peñarol: Juan Pablo Figueroa, Louis Dabney o Franco Giorgetti, Steffphon Pettigrew, Leonardo Gutiérrez y Juan Manuel Torres. DT: Marcelo Richotti.

Quilmes: Luca Vildoza, Eric Flor, Tracy Robinson, Ivory Clark e Iván Basualdo. DT: Javier Bianchelli.

Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Arbitros: Juan Fernández-Oscar Britez.
Hora: 21.

Venta de entradas

En la sede de Peñarol se venderá el remanente de entradas anticipadas esta mañana de 10 a 13. En cambio, en Quilmes ya finalizó el expendio. Los hinchas “tricolores” que aún no tienen su localidad podrán comprarla a partir de las 19, cuando abra la boletería del Velódromo.