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La Ciudad 11 de enero de 2021

Multas más caras, pero aún no se aplican

Desde este lunes se sancionará a los organizadores con hasta 3,3 millones de pesos. Sin embargo, estiman que las multas demorarían hasta dos meses en aplicarse.

Foto archivo.

En simultáneo a la aplicación de la restricción de las actividades nocturnas que rige de 1 a 6 a partir de este lunes, la Provincia encomendó reforzar los controles de las fiestas clandestinas y ordenó elevar el monto de las multas, que pasó de ser de hasta un millón de pesos a más de 3,3 millones de pesos para los organizadores.

Entre diciembre y lo que va de enero se labraron decenas de actas contravencionales por el desarrollo de fiestas clandestinas por incumplimiento del DNU que fija el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) y el “Distanciamiento Social Preventivo y Obligatorio (DISPO), que no permite el desarrollo de eventos masivos.
Al mismo tiempo, se considera el consumo de bebidas alcohólicas, prohibido en la vía pública.

Las multas, a partir de este lunes, serán de hasta 3,3 millones de pesos para quienes organicen una fiesta clandestina en la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, todavía las mismas no se han hecho efectivas y se aplicarían en el tramo final del verano.

El secretario de Seguridad, Horacio García, destacó la necesidad de “afianzar un trabajo conjunto” para restar posibilidades de que los organizadores puedan sortear las multas.

Hoy por hoy, “los inspectores labran las actas de constatación y se las envían al juez de faltas municipal, que es quien termina de calificar el hecho, como ocurre con el Poder Judicial en las intervenciones policiales”, aclaró.

García dejó entrever que los jueces de faltas “suelen despotricar contra los inspectores” y se toman su tiempo para actuar. En ese sentido demandó “un trabajo más afianzado”, considerando que la sanción que imponga el juez de faltas se eleva luego a los juzgados correccionales de la provincia de Buenos Aires.

Las actas labradas por cada fiesta clandestina están en ese laberinto burocrático. Todo indica que “llevará un tiempo” hasta que las infracciones se traduzcan en multas para los organizadores.

“Esto es algo que así no se puede hacer en dos meses, pero tenemos que tener en claro la gravedad de la situación. Hay quienes juegan un partido de 15 minutos, cuando hay que jugar los 90, si no la función pública hay que dejarla”, lanzó el secretario de Seguridad al exigir celeridad en la tramitación de las actas.

Se triplicaron los fiestas clandestinas en enero y pusieron en riesgo la temporada