Por Paola Galano

“Sauce mariposa” es el nuevo libro de poesías de Matías Kocens, un escritor y músico oriundo de la ciudad bonaerense de Ituzaingó. Aunque poco importa su procedencia, si es entendida apenas como una circunstancia del azar en la vida de este artista de 53 años, que hace del camino su propio hogar.

“No me siento cómodo quedándome mucho tiempo en un mismo lugar, y no me refiero solo a un lugar físico específicamente”, dijo en una entrevista con LA CAPITAL. Itinerante, siempre peregrino, Kocens es uno de esos poetas movedizos que entiende que la poesía nace como fruto de la propia experiencia.

Cada momento vivido en San Marcos Sierra, Bariloche o Mar del Plata -por citar algunas de las ciudades que visita con frecuencia- nutre sus textos que, a su vez, siempre tienen a la naturaleza como deidad. En ese sentido, este nuevo poemario no es la excepción.

“Sauce mariposa involucra viajes más largos, situaciones más extremas de escritura y tiene un mensaje para mí que es fundamental: que nos amemos los unos a los otros, así como nos gustaría que los otros nos amen. El amor es la energía más fuerte”, comentó y coincidió en que se encuentra en una etapa “muy crística”.

“Es un mensaje universal que nunca se llevó a cabo. Si ves la historia (de la humanidad) siempre hay guerras, desde el principio de los principios”, agregó el escritor, que tiene una particular manera de vender cada una de sus producciones literarias.

Camina por ciudades, pueblos, ferias, bares y paseos de cada lugar que visita y ofrece sus libros a los transeúntes. Muchos se detienen a escucharlo; es común que lea algunos de los poemas de manera improvisada, a quienes deseen conocer sus versos en vivo. Algunas veces, la policía lo insta a que se retire.

Con dibujos e ilustraciones, “Sauce mariposa” es un libro que puede leerse “de varias formas”, anticipó. “Podés leerlo en diez minutos, de principio a fin y va a tener un orden que tiene que ver con lo que se transmite y a la vez también es para que abras un poema y lo leas cuando estás en una meditación y así se te abren mundos”, aclaró.

“Son textos muy cortos, eran enormes pero los pude condensar, por eso trabajé con una correctora”, dijo y recordó que un sello editorial y artesanal de Córdoba imprimió este nuevo poemario.

“Barcos de agua”, “Picos de magia”, “Páginas del amanecer” y “Poderosas raíces” son otros libros del autor, que también es artista visual, músico y docente. Con su banda “Demente Caracol” llenó escenarios de los años ’90. Y ahora eligió a la poesía como expresión genuina de su interioridad.

Algunas de sus poesías: 

Ojos de serpiente

Noche de luz
ojos de serpiente
montañas en el agua
turquesa, verde y esmeralda
Realidad inventada
Sueños,
que no saben despertar
Vimos caer

Vimos caer
a la hoja antigua
desde la rama
hasta la cañada
¿La viste papi?
¡Mira ahí va otro!
Así pasamos
el otoño
hasta que el árbol
nos quedó seco
Al mar

Al sanar mi alma
al mar
le canté una plegaria