CORRIENTES.- Regatas Corrientes cerró mejor un partido en el que Quilmes compitió de igual a igual y se impuso 81 a 75 por una nueva fecha de la Liga Nacional de básquetbol.

La paridad fue el signo distintivo del primer tiempo. Quilmes limitó el poderío ofensivo del equipo local con una muy buena defensa en el primer cuarto. Sims y Quinteros no cargaron esta vez con el peso de una ofensiva que tuvo menos aporte de tiro exterior en relación a otras noches. En consecuencia, el equipo de Javier Bianchelli jugó relativamente cómodo y con las partidas en velocidad de Flor se las ingenió para mantener la paridad y hasta gozar de una pequeña luz.

Regatas, con apenas un 21% en tiros de tres puntos, consiguió un alto 65% en dobles y empezó a escapar a partir del comienzo del segundo cuarto con un gran reparto de tiros. Si bien sus dos máximos anotadores siguieron inadvertidos, hubo buenas respuestas individuales de Espinoza, Troutman o del ingresado “Pepo” Vidal.

Quilmes, siempre con problemas para ir a anotar en posiciones cercanas al canasto, se sostuvo con tres bombas de Flor, Clark y Sansimoni. En la recta final, además, Vildoza, que había jugado una floja primera parte, encadenó un par de aciertos para recortar la diferencia. Regatas se fue ganando al descanso largo, pero apenas 38 a 35.

Pablo Espinoza, de interesante primer tiempo, jugó un descomunal tercer cuarto (12 puntos y 4 rebotes en el parcial) y el equipo correntino siguió estirando ventajas. Quilmes mostró en ese lapso muchos problemas para anotar y la luz llegó a ser de diez puntos.
Pero el equipo marplatense no estaba muerto. Con Maciel en cancha, su ofensiva fluyó en los primeros minutos del último parcial. Con un triple suyo y uno de Flor, los de Bianchelli subieron rápido la cuesta, pasaron fugazmente al frente (65-64) y mantuvieron la paridad hasta los últimos cuatro minutos.

Quilmes había puesto en problemas a su rival con una defensa zonal en la primera mitad del cuarto final. Pero Regatas finalmente aprovechó los espacios y encontró la medida de su tiro exterior para recuperar el control del partido. Y un par de buenos ataques jugados para Troutman, siempre aprovechando la fragilidad visitante cerca del canasto, posibilitaron que los correntinos se pusieran 78-70 a falta de dos minutos y prácticamente aseguraran la victoria.