Sábado,06 de Diciembre de 2025
Dos hombres están imputados por falsificación de instrumento público y estafas reiteradas, en 62 casos en los que vendieron lotes sin contar con derecho alguno para realizar las transacciones.
Le dijeron que debían ingresar a su casa para verificar las condiciones en las que vivía con el fin de tramitarle una pensión. La mujer les entregó 500 pesos para iniciar la gestión y cuando se fueron descubrió que además le habían robado otros 1500, una billetera con documentos, un teléfono celular y remedios.
Ocurrió el jueves a la noche en un comercio de la avenida Libertad al 4200, donde el hombre, de 40 años, pretendía irse sin abonar la cuenta de 2000 pesos. Quedó imputado por estafa.
Las estafas consisten en los pedidos de dinero a cambio del pago de falsos impuestos y del envío de imágenes del rostro y del documento, que permiten a los estafadores la apertura de cuentas bancarias a nombre de las víctimas.
La Fiscalía de Delitos Económicos y la Dirección Departamental de Investigaciones recibieron a unas 50 víctimas que aseguran haber sido estafas por sumas cercanas a los 100.000 pesos cada una.
El hombre de la comunidad zíngara que el pasado viernes había querido estafar a un anciano y luego fue detenido al causar un doble choque, recuperó este martes su libertad. Reparó el daño de uno de los damnificados de la colisión con 140 mil pesos.
El operativo fue realizado por la Policía Federal en Pinamar, y el sospechoso, de 43 años, habría llevado a cabo las maniobras en distintas localidades de la zona.
Las acusadas habrían gastado más de 50.000 pesos y retirado sumas de dinero superiores a 170.000. Una de ellas es menor de edad.
Habían utilizado cheques apócrifos en una agroquímica de Quequén. Fueron interceptados en Balcarce cuando arreglaban la compra con un comisionista.
Un hombre recibió un llamado a su teléfono celular en la zona de Chapadmalal y su interlocutor le dijo que, para recibir la cuarta dosis de la vacuna contra el Covid-19, le debía suministrar un código de seis cifras en una segunda llamada. Después, hackearon su Whatsapp y le solicitaron dinero a sus contactos: uno de ellos cayó en la trampa.
