El Gobierno nacional ratificó hoy al municipio General Pueyrredon por segunda semana consecutiva como distrito en alerta epidemiológica, decisión que el fin de semana pasado desató una incertidumbre tan fuerte como inédita y que ahora, una vez más, depende de que el Gobierno provincial defina si la ciudad se mantiene en Fase 3.

La Nación dio a conocer este domingo el documento que contiene la clasificación de departamentos en zonas epidemiológicas y sanitarias, el cual informa para todo el territorio nacional -con vigencia hasta el 21 de mayo- en qué escenario y bajo qué restricciones se encuentra cada distrito de acuerdo al riesgo epidemiológico bajo, medio, alto o bien en alerta.

En esa última categoría vuelve a figurar General Pueyrredon junto a unos 40 municipios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y nuevamente Bahía Blanca, Rosario, San Lorenzo y seis localidades de Mendoza: la capital provincial (Mendoza), Godoy Cruz, Guaymallén, Las Heras, Luján de Cuyo y Maipú.

La ciudad vuelve a depender ahora de la decisión del gobernador Axel Kicillof, quien en las próximas 48 horas deberá confirmar la situación sanitaria en la que se encuentran los 135 municipios bonaerenses.

El último martes, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires ratificó al municipio en la fase 3 del esquema de restricciones para mitigar el impacto de la segunda ola de coronavirus.

Pero dos días antes, el domingo pasado, en medio de intensas negociaciones entre el gobierno municipal y la provincia tras la categorización del distrito en alerta epidemiológica, la Provincia debió salir aclarar la situación de General Pueyrredon -confirmó que continuaba en Fase 3- para despejar las dudas que se habían generado respecto de la posibilidad de aplicar restricciones más fuertes y similares a las de la fase 2, como las que contempla el alerta.

Pese a eso, Mar del Plata no dejó de estar en alerta epidemiológica, según el criterio de Nación. Resta ahora conocer la definición de la Provincia de Buenos Aires respecto al sistema de fases.

Cabe aclarar que las cuatro zonas sanitarias que define la Nación son el resultante de tres indicadores que miden en cada uno de esos lugares la progresión de contagios y la saturación del sistema de salud: se trata de la razón, la incidencia y la oferta local de camas de terapia intensiva.

A partir del resultado de esas tres variables, las jurisdicciones se dividen en zonas de bajo riesgo, de medio riesgo (donde las autoridades provinciales quedan a cargo de tomar medidas preventivas para disminuir contagios), de alto riesgo (con suspensiones en marcha, limitaciones para el funcionamiento de comercios y restricciones para circular, aunque no se trate de las medidas más duras) y finalmente de alerta epidemiológica (donde se aplican las disposiciones más fuertes, como la suspensión de las clases presenciales y la prohibición para circular de 20 a 6, salvo los trabajadores esenciales que lo justifiquen, entre otras).

Con estas cuatro zonas sanitarias, el mapa de la Argentina difundido por el Ejecutivo para la aplicación de las medidas por el presidente Alberto Fernández, y que se pondrán en marcha a partir de la entrada en vigencia del DNU 287/21, quedó conformado del siguiente modo, según un criterio ascendente en la gravedad de la situación epidemiológica:

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